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Siempre en el ojo de mira de la opinión pública y muy criticados por ciertas intervenciones. Los cuerpos de antidisturbios de las Fuerzas de Seguridad del Estado vuelven al foco cada vez que tienen lugar una serie de manifestaciones y altercados civiles en los espacios públicos. Desde muchos sectores, defienden el procedimiento de este cuerpo y otros muchos los critican por utilizar violencia y fuerza desmedida hacia la población civil.
Lo cierto es que no se trata de un trabajo nada fácil, más allá de lo que supone a nivel social, si no también por los peligros a los que pueden llegar a estar expuestos. De hecho, en situaciones límite o de amplio riesgo, más de uno ha acabado en urgencias o incluso falleciendo. Por todo ello, son profesionales que reciben una formación específica con amplias exigencias y requisitos para llegar a formar parte. Pero, ¿cuáles son las condiciones laborales de los antidisturbios?
Así son los sueldos y los contratos de los antidisturbios
Para empezar, debemos saber que los antidisturbios forman parte de las Unidades de Intervención Policial, que se crearon en 1990, mediante el Real Decreto 1668/1989 de 29 de diciembre. Son órganos móviles, lo que les permite actuar en cualquier lugar del territorio del Estado en el que se requiera su presencia y aunque no lo parezca, su única labor no es la de prevenir disturbios derivados de manifestaciones, también pueden ser convocados para prestar auxilio en catástrofes.
En lo referente a sus circunstancias laborales, estas vienen recogidas en el Real Decreto de retribuciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. De la misma forma que un policía municipal o nacional, los antidisturbios tendrán sueldos diferentes dependiendo de la comunidad autónoma en la que se encuentren, además de recibir ciertos pluses por desplazamiento, antigüedad, etc., que complementarán su salario a final de mes.
Los antidisturbios pertenecen al segmento de la policía nacional y concretamente se les denomina como UIP Policía Nacional, por lo que contarán con las mismas condiciones laborales que un policía nacional, es decir, nivel funcionarial en lo referente a derechos y obligaciones. Con respecto a su salario en concreto, este oscila entre los 1.500 y los 2.600 euros, tomando en cuenta las características antes mencionadas de localización y pluses, así como el cargo jerárquico que ostenten.
La sangre fría
Aunque el salario y las condiciones laborales pueden resultar tentadoras, lo cierto es que este trabajo no está hecho para todo el mundo. Por supuesto, al igual que cualquier trabajador dentro de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del estado, estos deben pasar una serie de pruebas físicas bastante exigentes para asegurarse de que cuenten con una buena condición y salud física.
Pero además, los antidisturbios pasan por una serie de pruebas psicotécnicas especializadas, donde se valoran todo tipo de aptitudes y rasgos de la personalidad del candidato. Sin embargo, hay una en concreto que suele condicionar la balanza, y no es otra que la capacidad de mantener la sangre fría en momentos en los que están sometidos a intensas provocaciones y situaciones de estrés.
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