¿Cuáles son los hábitos más saludables para el aparato digestivo?

En el marco del Día Mundial de la Salud Digestiva hemos recogido diez puntos para mantener sano el aparato digestivo. El primer punto de esta lista es sumamente obvio para los habitantes de España. Hay que consumir aceite de oliva. Casualmente, este producto que se suele producir en los olivares de Jaén es muy consumido en las comidas de todo el mundo dado que es uno de los ingredientes de la dieta mediterránea. Además, el ácido oleico que se encuentra fundamentalmente en el aceite de oliva mejora la función pancreática y aumenta la absorción de minerales.

Tomar fibra facilita la acción del aparato excretor. Según recomiendan los expertos, la cantidad que recomiendan es de treinta gramos. El exceso de la misma produce estreñimiento. Otro de los hábitos más saludables para el aparato digestivo es comer cinco piezas de fruta al día. Esto supone que deberíamos comer una pieza de fruta en cada comida. Con ello, afirmaríamos desayuno, media mañana (sustituyendo a los aperitivos o snacks de antes de comer), comida, merienda y cena.

El aparato digestivo debe estar bien nutrido de líquidos

El aparato digestivo debe demandar cada día como mínimo un litro y medio de agua. Además, en las zonas de más calor durante estos días deberíamos superar el litro y medio y alcanzar los dos litros de agua. De la misma manera, los expertos del aparato digestivo nos aconsejan no abandonar la leche. Algunas personas no toleran bien la  eche porque con la edad disminuye la producción de la enzima llamada lactasa, que ayuda en la digestión de la lactosa (o azúcar de la leche).

Si se deja de consumir leche, con el tiempo se deja de producir la enzima lactasa. Esto además repercutirá negativamente en nuestra salud ósea porque nos estaremos privando de una de las mayores fuentes de calcio de nuestra alimentación. Lo ideal en estos casos no es dejar de tomar leche, sino tomar leche sin lactosa, con lo que tu sistema digestivo se sentirá como cuando eras joven.

Deberíamos evitar la ingesta de alimentos de forma abundante

Tras un período de confinamiento, la sociedad española ha estado más de dos meses sin relacionarse y, poco a poco, con la apertura de las terrazas, vamos volviendo a la normalidad. Aunque van llegando los últimos coletazos de la primavera en la que aprieta el calor y con ello llega el verano.

Además, debemos evitar las comidas abundantes. Esto evita la sobrecarga del sistema digestivo, la producción elevada de insulina, y aporta energía de modo continuado a lo largo del día. Debemos evitar las mantecas, mantequillas y margarinas y según aconsejan deberíamos cocinar con aceite de oliva y girasol.

Evitar las bebidas azucaradas, carbonatadas y los dulces

La gente que realiza deporte está acostumbrada a tomar después de la práctica deportiva bebidas como Gatorade o Aquarius debido a que han quemado calorías y deben reponerlas pero no de golpe. Estas bebidas producen un “efecto rebote” de modo que después la secreción ácida es mayor. Además aumentan la distensión abdominal. Reduce el consumo de dulces, ya que también favorecen la producción de gas.

El último de los consejos que ayudan a cuidar nuestro sistema digestivo es el de moverse. Tras dos meses de confinamiento en casa, el mayor consejo que se puede dar estos días es retomar poco a poco la actividad física, ya que si queremos volver a tope desde el minuto uno generemos el efecto contrario y tengamos que volver al fisioterapeuta a tratar las dolencias antes de lo previsto. Por ello, desde el primer día de la desescalada se comenzó desconfinando a la población en paseos de una hora y en franjas de ejercicio tanto a primera como última hora. A partir de la fase 2, en la que se encuentra media España, no existen franjas horarias para realizar ejercicio.