Dos de cada tres autónomos se han visto obligados a subir los precios para hacer frente a la inflación

Desde el comienzo del COVID son muchas, o casi todas, las restricciones que se han eliminado debido a la mejoría de la situación. Sin embargo, y a pesar de la vuelta a la nueva normalidad, los autónomos siguen inmersos en una situación económica difícil, por lo que se han visto obligados a aumentar el precio de sus productos y servicios tras el respectivo aumento de la inflación.

Los motivos a los que se enfrentan los trabajadores son muy complicados: guerra de Ucrania, inflación desbocada, continuo crecimiento de las materias primas y el aumento de la electricidad y los carburantes.

Situación actual: los autónomos no recuperan lo perdido en los años de pandemia

Con la eliminación de las restricciones del COVID parecía que la cruel situación para los autónomos había llegado a su fin, pero no. Dos de cada tres trabajadores independientes no han recuperado todo lo perdido durante estos últimos años de pandemia, según lo refleja el Barómetro Situación Autónomos de mayo de 2022 elaborado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA). En el otro lado de la balanza se encuentra el 31,9 %, los cuales sí afirman haberse recuperado, aunque no al 100 %.

La situación para estos trabajadores sigue siendo bastante complicada, sobre todo en los últimos meses, donde sin quererlo, se han visto inmersos en una serie de acontecimientos que han terminado afectando a sus negocios, por ejemplo: la invasión rusa hacia Ucrania; el aumento de los productos, la electricidad y el gas; y el continuo aumento de la inflación, que alcanza niveles inimaginables.

La incertidumbre económica sigue presente en el colectivo, ya que solo un 7 % de ellos prevén generar empleo en los próximos meses, frente a otro gran sector que se verá obligado a recortar plantilla.

Ayudas económicas durante la crisis del COVID

En el barómetro de las encuestas también se ha reflejado datos acerca de si los autónomos han accedido a las ayudas que se pusieron en marcha para frenar el impacto económico de la crisis de la Covid-19. Hay que destacar que el 43,5 % afirman no haberse beneficiado de ninguna ayuda o prestación, es decir, alrededor de millón y medio de trabajadores independientes no se han beneficiado de ninguna ayuda durante los dos años de pandemia.

Por otro lado, el 55,3 % restante, según afirman desde ATA, afirman haber recibido estas ayudas. En concreto: ayuda estatal, prestaciones por parte de su comunidad autónoma o ayudas concedidas por diputaciones o entes locales.

También se les preguntó el por qué de no haber recibido dichas ayudas, a lo que los trabajadores responden: falta de requisitos solicitados, exceso de burocracia para acceder a ellas o denegación de la ayuda.

El futuro económico y laboral de los trabajadores

En cuanto al futuro de dichos trabajadores, tres de cada diez autónomos contemplan que su actividad disminuya en los próximos meses debido a las dificultades a la que se enfrenta el sector. Muchos de ellos se han replanteado la idea de tener que cerrar su negocio, muchos otros confían en la lenta, pero eficaz mejoría.

El 20 % de los encuestados tienen previsto solicitar las ayudas establecidas en el programa Kit Digital, frente al 55,2 % que no se plantea ni tiene intención de hacerlo. Además, muchos de ellos no tienen conocimiento de esta ayuda.