Hacer la compra o utilizar las redes sociales siguen teniendo barreras para las personas con discapacidad visual

En España hay más de un millón y medio de personas con discapacidad visual, de las cuales al menos 70.000 presentan una ceguera total. Según la Organización Mundial de la Salud en sus últimas estimaciones, se contaba con que cerca de 253 millones de personas padecía baja visión. En el camino por una sociedad más igualitaria y adaptada a todas y todos, reducir las barreras con las que se encuentran estas personas es una prioridad.

Sin embargo hoy en día, sigue habiendo otras barreras más allá de las arquitectónicas con las que las personas con discapacidad visual deben lidiar en su día a día. Actividades tan comunes y necesarias como hacer la compra o poder realizar una prueba de embarazo aún son especialmente difíciles para estas personas. Esto se debe a que muchas veces los fabricantes y desarrolladores siguen sin tener en cuenta a los usuarios ciegos, "piensan en el consumidor mayoritario" opina la periodista Ana Gómez, que perdió la visión con 3 años, en una entrevista para RTVE.

Herramientas para la discapacidad visual

Una de las principales formas de luchar contra las barreras a las que se enfrenta una persona con discapacidad visual es la implementación de herramientas ya existentes a todos los ámbitos posibles. Las etiquetas con un sistema braille o la audio descripción, son fundamentales para mejorar la vida de millones de personas.

Por ejemplo, una actividad de ocio tan popular como ir al cine, sigue siendo de difícil acceso para personas ciegas. A pesar de que algunos cines han implementado un sistema de autodescripción, estos siguen siendo muy escasos. José María Ortiz, responsable del área de innovación del CTI comenta para RTVE que "Existen sesiones que tienen la audiodescripción de la película, pero no muchas. Tienes que ir a horarios muy concretos y cines muy concretos."

¿Te imaginas tu vida sin poder utilizar Instagram o TikTok? Las redes sociales forman parte de nuestra vida cotidiana, a través de ellas nos conectamos con el mundo entero. Sin embargo, a pesar de estar en la vanguardia de innovación en comunicación y redes, aplicaciones como las antes mencionadas apenas están adaptadas a las personas con discapacidad visual. "Podrían mejorar mucho si cuando subes una foto te saliera un aviso que te recordase añadir un texto descriptivo para que pueda ser accesible", añade Ortiz.

La salud sexual o hacer la compra siguen sin resultar fáciles

Alimentarnos es absolutamente necesario para todo ser humano y por tanto hacer la compra también lo es. Sin embargo, en este aspecto, las personas con discapacidad visual encuentran muchos escollos. El primero es la mala adaptabilidad que tienen la mayoría de los supermercados, con el añadido de la escasez de etiquetas con un sistema en braille.

Y otros temas tan olvidados como la salud sexual también se ven precarizados. En esta misma línea, aún no han suficiente etiquetaje en braille para anticonceptivos como los preservativos, incluso realizarse una prueba de embarazo de forma privada era imposible para una mujer con discapacidad visual. Hace tan solo dos años, la Royal National Institute for Blind sacó un prototipo de test de embarazo para mujeres ciegas que sustituía las pantallas electrónicas o las líneas habituales por un gran botón elevado para indicar el resultado. Este tipo de necesidades, ponen en relieve que aún queda un trabajo importante para mejorar la adaptabilidad de muchos aspectos cotidianos para las personas ciegas.