Belgrado pide a la UE que aumente la presión a Pristina para que levante el arancel

Belgrado, 18 ene (EFE).- El presidente serbio, Aleksandar Vucic, pidió hoy a la Unión Europea (UE) una mayor presión sobre Kosovo para que Pristina retire el arancel del 100 % a las importaciones de productos serbios.

En rueda de prensa en Belgrado, Vucic ha instado también al Gobierno kosovar a que levante la citada tasa, impuesta en noviembre pasado, al considerar que la medida obstaculiza el diálogo que desde hace años llevan a cabo ambos países para normalizar sus relaciones, bajo mediación de la UE.

"Mi solicitud es que las demandas (de la UE) a la parte albanesa sean más claras y más determinadas (...) porque es muy importante que sigamos negociando", explicó Vucic.

La UE pidió a Kosovo en varias ocasiones que revoque las tarifas impuestas.

"Pido a Pristina que cancele aranceles, no es difícil para mi pronunciarlo", indicó el presidente serbio, y advirtió que "cuando no hay diálogo, siempre hay peligro de que se produzcan situaciones más difíciles y peores en el futuro".

"Sin una solución tendremos grandes problemas, políticos y económicos, tanto los unos como los otros", declaró.

La "idea sustancial" de Vucic es que serbios y kosovares (así como serbokosovares y albanokosovares) intenten llegar a un acuerdo por sí mismos ya que lograrían así más fácilmente el apoyo internacional.

Si bien aseguró que de su parte pondrá el máximo esfuerzo "para que se produzca" el resultado deseado, reconoció ser en estos momentos "muy pesimista".

Kosovo impuso aranceles del 100 % a los productos importados de Serbia y Bosnia-Herzegovina a pesar de que la medida viola un acuerdo regional de libre comercio.

Pristina alegó que Serbia mantiene una campaña internacional en contra de la independencia que Kosovo, antigua provincia serbia poblada por una gran mayoría de ciudadanos de origen albanés, proclamó de forma unilateral en 2008.

Belgrado -que no reconoce la soberanía kosovar- y Pristina tratan de alcanzar un acuerdo jurídicamente vinculante que permita superar el conflicto, una condición exigida por la UE para un eventual futuro ingreso de ambos países.

El primer ministro de Kosovo, Ramush Haradinaj, dijo en varias ocasiones que el arancel del 100 % sobre productos serbios será mantenido en pie hasta que Serbia reconozca la independencia kosovar.