Pautas y consejos para mantener el bienestar físico, mental y social durante el confinamiento

Con el objetivo de ayudar a cuidar la salud física y mental en esta situación de crisis sanitaria por el coronavirus, vamos a presentar una serie de pautas y consejos para mantener el bienestar durante el confinamiento.

La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. La salud de todos los pueblos es una condición fundamental para lograr la paz y la seguridad y depende de la más amplia cooperación de las personas y de los Estados, según la Organización Mundial de la Salud.

El confinamiento puede hacer que se resientan nuestro cuerpo y nuestra mente

Desde que el Gobierno decretase el estado de alarma en España por el coronavirus, vivimos confinados en nuestras casas y estamos poniendo a prueba nuestra fortaleza mental y la de nuestros familiares. El reto podría ser mayor si en las viviendas convivimos con menores, familiares con alguna discapacidad y personas mayores o con necesidades especiales.

Para lograr el Objetivos de Desarrollo Sostenible 3 es fundamental garantizar una vida saludable y promover el bienestar universal. Anteriormente, los centros de día y locales de jubilados velaban por la salud y el ocio de las personas mayores o dependientes, pero en este momento, tan complicado por la crisis del coronavirus, algunas pautas básicas para mantener el buen estado físico y el ánimo no se están cumpliendo.

Mantener un buen estado físico y de ánimo de personas mayores y sus familias

Los expertos recomiendan que los colectivos mencionados sigan las siguientes pautas diarias para mantenerse activos.

• Mantener un horario fijo de levantarse de la cama y acostarse.
• No abandonar la higiene personal y cambiarse de ropa como si fuéramos a salir de casa.
• Mantener los horarios de comidas y valorar la posibilidad de bajar un poco la cantidad que ingerimos ya que vamos a hacer un menor esfuerzo.
• Realizar una rutina de paseos por casa, y ayudar al anciano/a con sus ejercicios para facilitar su bienestar físico. 
• No tener encendida la televisión todo el día con noticias sobre el mismo tema, ya que puede aumentar la angustia.
• Cada día, mantener contacto telefónico con algún familiar. Es tan importante que las personas mayores se comuniquen con sus familiares y los amigos de su generación como que las personas que están a su cuidado tengan comunicación con el resto de la familia. Para ello, se recomienda utilizar medios que permitan vernos, como las videoconferencias.
• El apoyo social y familiar es muy importante para todos. Cuidar y acompañar a la persona cuidadora es fundamental en este momento de aislamiento.
• Posibles distracciones para las personas mayores: juego de cartas, dominó, sopa de letras, lectura... Sacar temas de conversación que puedan tener interés como su pueblo, lo que hacía en su infancia… Tratar de recordar cosas amables que le hagan sonreír.
• Procurar que el carácter alegre y amable no se pierda a lo largo de este confinamiento.

Consejos y recomendaciones para los menores de la casa

La mayoría de los menores estaban acostumbrados a ir a clases todos los días y a tener la mayoría de las tardes actividades extraescolares de tipo deportivas, de refuerzo o de habilidades varias. Desde el 14 de marzo todo se paró radicalmente, por lo que los menores están atravesando un momento delicado y necesitan adaptarse a esta nueva situación. Estas son algunos consejos en relación a ellos.

• Dar al niño información de la situación: explicarle en términos comprensibles para su edad y siempre con un mensaje positivo. 
• Contacto telefónico con amigos y amigas: hablar con padres y madres de compañeros del colegio y realizar una o dos llamadas diarias para intentar que hablen entre ellos. 
• Contacto audiovisual telemático: igual actividad, pero por videollamada, Skype..., si existe posibilidad de ello.
• Contacto visual real con otros niños y niñas: procurar ver si hay otros niños o niñas al alcance visual desde las ventanas, o terrazas de casa. Promover la comunicación con ellos, saludándoles con sonrisas e incluso alguna palabra. 
• Televisión: favorecer que puedan ver programas propios de se edad en los que salen o participan niñas y niños. 
• Música, canción y baile: diariamente escuchar con el menor una canción infantil de discos, radio, Internet... y cantarla y bailarla juntos.
• Expresión gráfica y juego interactivo: animar al niño a dibujar y colorear cada día a alguien de su clase, portal, barrio o familia, interactuando con ellos.
• Actitud lúdica del adulto: potenciar el lado ‘infantil’ y creativo del padre y/o madre, mediante juegos, posicionándose ambos en roles de iguales a su hijo.
• Nutrición emocional: dedicarles cariño y afecto, así como verbalizaciones positivas y reforzadoras de cualquier conducta. 
• Expectativa positiva: muy importante transmitir una expectativa positiva de solución de está situación. Relativizarla con los más pequeños; y que sea favorable a los de 8-10 años.

Cuidado de personas con necesidades especiales

La alteración de las rutinas que ha provocado el actual confinamiento tiene un efecto aún más pernicioso para las personas con necesidades especiales y sus familias. Seguir una serie de consejos hará que el cuidado resulte más llevadero.

• Mantener un horario fijo de levantarse de la cama y acostarse.
• No abandonar la higiene personal y cambiarse de ropa como si fuéramos a salir de casa.
• Mantener los horarios de comidas y valorar la posibilidad de bajar un poco la cantidad que ingerimos ya que vamos a hacer un menor esfuerzo.
• Realizar una rutina de paseos por casa, y ayudar al anciano/a con sus ejercicios para facilitar su bienestar físico.
• No tener encendida la televisión todo el día con noticias sobre el mismo tema, ya que puede no ayudarnos a mantener la calma.
• Cada día, mantener contacto telefónico con algún familiar. Es tan importante que las personas enfermas se comuniquen con sus familiares y los/las amigos/as de su generación como que las personas que están a su cuidado tengan comunicación con el resto de la familia. Para ello, se recomienda utilizar medios que permitan vernos.
• El apoyo social y familiar es muy importante para todos. Cuidar y acompañar a la persona cuida-dora es fundamental en este momento de aislamiento.
• Posibles distracciones para las personas enfermas: juego de cartas, dominó, ajedrez, sopa de letras, lectura...
• Procurar que el carácter alegre y amable no se pierda a lo largo de este confinamiento, ya que caer en un momento de tristeza o enfado es un riesgo aún mayor para las personas enfermas.