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El cambio climático da paso al calentamiento global. Durante el año 2019 tuvo consecuencias en la salud, la comida y los hogares de millones de personas.
Asimismo, la vida marina sufre un riesgo importante, al igual que todos los ecosistemas que conforman la tierra, pues el cambio climático causa estragos realmente alarmantes.
Desde la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y la ONU comentaron que, a pesar de estar atravesando la situación del coronavirus, no podemos reducir los esfuerzos en la lucha contra él.
El cambio climático continúa siendo muy preocupante para el mundo
"El coronavirus es una enfermedad que esperamos que sea temporal, con impactos temporales, pero el cambio climático ha estado ahí por muchos años y se mantendrá por muchas décadas, y requiere de acción continua", afirmó Antonio Guterres Secretario General de la ONU.
Antonio Guterres hizo referencia a la reducción de emisiones en China y en otros países por el confinamiento, pero avisó de que no se pueden sobrestimar estos hechos que solamente son temporales.
El Secretario General de la ONU comentó que "No vamos a combatir el cambio climático con un virus. Aunque se le debe dar toda la atención necesaria, no podemos olvidarnos de la lucha contra este fenómeno y los demás problemas que enfrenta el mundo".
Petteri Talas, Secretario General de la OMM, lamentó la situación que la pandemia genera y todas las muertes que ha causado, pero recodó que el cambio climático es "mucho peor".
"El virus tendrá un impacto económico a corto plazo, pero las pérdidas serán masivas si pensamos en el calentamiento global. Estamos hablando de un problema de mayor magnitud, con consecuencias en la salud de las personas y en nuestras sociedades mucho más graves", apuntaba Petteri Talas.
El 2019 concluyó con una temperatura media mundial por encima de los niveles preindustriales
Desde la OMM han realizado un estudio que notifica las señales físicas que alertan del cambio climático:
- Calentamiento de los océanos y la Tierra.
- El nivel del mar.
- El deshielo.
- Tormentas, sequías, incendios e inundaciones.
El 2019 acabó cerrándose con 1,1ºC por encima de los niveles preindustriales que se tienen estimados. Esta subida de la temperatura mundial no se había superado desde el 2016, cuando un episodio muy intenso de El Niño agravó ese aumento de la temperatura
"El calor del océano está en un nivel récord, con temperaturas que aumentan al equivalente de cinco bombas de Hiroshima por segundo. Contamos el costo en vidas y medios de vida humanos a medida que las sequías, los incendios forestales, las inundaciones y las tormentas extremas cobran su precio mortal. No tenemos tiempo que perder si queremos evitar una catástrofe climática", agregaba el Secretario General de las Naciones Unidas.
Los datos obtenidos reiteran lo que los investigadores ya nos habían avisado. Y es que 2019 fue el segundo año más cálido del que se tienen datos desde el comienzo de mediciones instrumentales.
El estudio señala que el quinquenio 2015-2019 engloba los cinco años más cálidos de los que se tiene constancia. Además, desde el 2010 al 2019 se señala como la década más cálida que se ha registrado. Desde los años 80, cada nuevo decenio ha sido más cálido que los anteriores desde 1850.
Y es que si las concentraciones de gases de efecto invernadero continúan, por ende, el calentamiento global persistirá. Un pronóstico reciente muestra la probabilidad de que en los próximos cinco años se produzca un nuevo récord de temperatura mundial anual.
Se prevé que en los próximos cinco años suceda un nuevo récord de temperatura media anual en el mundo
El mes de enero de 2020 ha sido uno de los más cálidos desde que se tienen datos. Y es que en muchas partes del hemisferio norte han pasado un invierno excepcionalmente benigno.
Por otro lado, el humo y los contaminantes procedentes de los catastróficos incendios de Australia se propagaron por todo el mundo, provocando un pico en las concentraciones de CO2.
Y además, la temperatura en la Antártida ha batido récords, lo que se acompañó por episodios de deshielo a gran escala y la fractura de un glaciar, lo que tiene como consecuencia la subida del nivel del mar.
El jefe de la Organización Meteorológica Mundial continuó explicando que la temperatura es solo un indicador del cambio climático en curso.
A este indicador se le suman las alteraciones de los patrones de lluvia que han repercutido a varios países, el aumento cada vez mayor del nivel del mar, la expansión térmica del agua del mar y el derretimiento de los grandes glaciares de Groenladia y la Antártida.
“Esto expone las zonas costeras y las islas a un mayor riesgo de inundaciones y puede provocar que sus zonas bajas queden sumergidas por las aguas”, aseguró Taalas.
“Sin un control rápido de las emisiones no hay mucho que se pueda hacer para atenuar los impactos”, aseguró a Noticias ONU Maxx Dilley, director adjunto del departamento de servicios de la citada Organización.
Y es que, según los expertos, el cambio climático deja ver claramente que la tendencia va cada vez más a los extremos. Por ello, no debemos de relajarnos pensando que como estamos en casa y han bajado los niveles de contaminación ya se ha solucionado este grave problema que amenaza la vida en la Tierra.
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