A los científicos e investigadores nadie los ve. Ellos realizan una labor tan importante aislados del mundo, sin que nadie pueda ver sus largas horas de trabajo y lucha para el bien de todos.
Las primeras redes sociales datan de hace 500 millones de años con la aparición de los rangeomorfos. Estos comenzaron siendo unos animales microscópicos pero alcanzaron los cuatro metros.