Comer solos: Todo un reto para muchas personas con discapacidad

La alimentación esa una tarea cotidiana que puede resultar complicada para las personas con discapacidad o dependientes. Para aquellos que tienen problemas de movilidad, en especial para las personas mayores, existen ayudas técnicas para que comer o cocinar sea más sencillo y puedan hacerlo solos.

Muchas personas necesitan a alguien que les pueda dar de comer, una tarea que requiere paciencia y dedicación. Los cuidadores deben estar atentos a muchas cosas. Las más importantes son dedicar tiempo a la persona dependiente para que pueda masticar bien y que esté en buena posición, con la espalda recta y erguida, para evitar posibles atragantamientos.

Por supuesto, la dieta de las personas con discapacidad debe ser equilibrada e incluir verduras, carnes y pescado, aunque conviene considerar sus preferencias en cuanto a sabores o texturas.

Hoy hablamos sobre la alimentación de las personas con discapacidad, toma nota.

¿Cómo consiguen comer solos aquellos que tienen una discapacidad?

Conseguir comer solos es un reto importante ya que aporta confianza y estima personal de las personas. Existen dos posibilidades de falta de autonomía en las comidas: debido a una enfermedad o por una pérdida de capacidad. Esta pérdida puede vivirse como una regresión y el momento de la comida se convierte en un momento de angustia, de infantilización y falta de dignidad. Cuando es debido a una discapacidad desde la infancia conquistar la autonomía suele ser un esfuerzo y un combate del niño, los padres y los profesionales.

Desde GNDiario somos conscientes de lo importante que es comer solos y de enseñar habilidades para que las personas con discapacidad puedan cocinar y alimentarse de manera autónoma e independiente.

Por eso, el uso de algunos materiales y productos puede ser de gran ayuda, tal y como te explicamos a continuación.

Ayudas técnicas, dispositivos de asistencia o tecnologías de apoyo enfocadas a la alimentación de una persona con discapacidad

Los avances tecnológicos y médicos están logrando poner al alcance de las personas con discapacidad un conjunto de elementos y dispositivos que les permiten desenvolverse de forma autónoma en un entorno que para ellos está lleno de dificultades.

Para superar estas barreras, como el reto de comer solos, existen las ayudas técnicas y, más concretamente, las ayudas técnicas para las actividades de la vida diaria.

Elementos de ayuda para comer solos

• Los baberos desechables, lavables o resistentes al agua previenen las manchas en la ropa, y son un complemento muy útil para comer solos si tenemos problemas de control o temblores.

• Los abridores de silicona, que minimizan el esfuerzo para abrir tapones, o los abrelatas con un mango especial y que pueden usarse con una única mano, son otras herramientas que facilitan que las personas con problemas de movilidad puedan desenvolverse mejor en la cocina.

• En el mercado también existen cubiertos especiales, que tienen un mango ergonómico y que están diseñados para que las personas recuperen su autonomía y puedan comer solas.

• Las personas mayores o con alguna lesión en ocasiones no tienen fuerza suficiente para abrir los tarros. Los abridores de silicona minimizan el esfuerzo para abrir tapones, ya que evita que su deslizamiento. Los abrelatas, abrebotes tienen un mango especial y además son utensilios adaptados para que puedan usarse con una sola mano.

• Los cubiertos especiales tienen un mango ergonómico están diseñados para que la persona recupere su autonomía y pueda comer sola. Los cuchillos mecedora son muy cómodos y los que tienen un mango especial ayudan a cortar sin emplear demasiada fuerza.

• Los platos con borde alto ayudan a la hora de comer evitando que la comida caiga fuera del plato. También encontramos bordes ajustables a cualquier vajilla para intercambiar y lavar fácilmente.

• Las tablas de cortar con resortes o el untador para usa sola mano pueden facilitan la tarea evitando que los alimentos se alejen al cocinar.

Cocinas cada vez más accesibles

Para los usuarios de sillas de ruedas, muletas y/o andadores,  la cocina, junto con el baño, suelen ser las estancias del domicilio donde encuentran más dificultades para ser independientes.

Encimeras, muebles altos, electrodomésticos, etc. no les ponen las cosas muy fáciles.

Además, las personas mayores también encuentran dificultades a la hora de cocinar, que tiene que más que nada con la ergonomía de la vajilla entre otras cosas.

Las cocinas modulares dan respuesta a este tipo de problemas, pues permiten gestionar el espacio acorde a las necesidades de cada usuario. La configuración de estas cocinas es totalmente adaptable y su distribución puede hacerse por áreas de trabajo o por altura.