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Los deportistas rusos no podrán participar en el Mundial de Natación de este año. Así lo ha decidido la Federación Internacional de Natación (FINA) y, es que, la cita peligraba ya que, la expedición de Alemania y de Suiza amenazaban con boicotearla si participaban tanto Rusia como Bielorrusia. Y Rusia, al conocer la noticia, la ha rebatido quitando a todos sus nadadores de las competiciones internacionales de este 2022. El máximo organismo acuático ha sido duro en su comunicado.
Los deportistas rusos se quedan sin participar y sin la sede de Kazán
La Federación Rusa de Natación se queda sin la representación de los deportistas rusos y además sin la sede de Kazán. Todo ello por las consecuencias que está dejando la invasión rusa en Ucrania. Además también pierden su plaza en el sorteo del Mundial de waterpolo.
Al margen de estas medidas, la FINA también decidió, y como reza su comunicado, "el Panel Disciplinario de la FINA abrió un procedimiento contra el nadador ruso Evgeny Rylov por una posible violación de las reglas de la FINA luego de su supuesta participación en un mitin a favor de la guerra en el Estadio Luzhniki en Moscú. El Ejecutivo de la FINA ha solicitado que se agilicen los procedimientos del Panel". Rylov mostró de manera explícita su apoyo a las políticas de Putin y a la guerra.
La FINA es la última federación que margina a Rusia
La FINA ha declarado dentro del comunicado su enérgica condena a los hechos que nos llegan cada día desde Ucrania. El equipo ucraniano de natación está entrenando en la localidad italiana de Ostia. La baja de los deportistas rusos en estos deportes es estratégica ya que, tanto natación como gimnasia o patinaje suelen ser los deportes en los que suelen destacar cuando llegan las grandes citas.
El deporte mundial continúa condenando los hechos que comenzaron hace más de un mes
La invasión de Rusia a Ucrania comenzó hace más de un mes y, pese a la tibieza que se instauró al principio, las autoridades deportivas han actuado con rapidez. Desde la UEFA, por ejemplo, los deportistas rusos iban a ser protagonistas ya que San Petesburgo estaba preparada para ser la sede de la final. Además, uno de los patrocinadores más importantes, Gazprom, también es ruso.
La conclusión es que no siempre puede ganar el dinero. San Petesburgo fue despojada del honor que supone acoger una final de Champions League dejando ese hueco al Estadio Saint Dennis, donde la selección francesa juega sus partidos como local.
Varios deportistas como la patinadora Sara Hurtado o el jugador de balonmano Carlos Molina optaron por volver a España y huir del conflicto. En el caso de Sara, la patinadora estaba entrenando en Moscú y el jugador de balonmano estaba en la liga ucraniana. Está claro que la culpa no es del deporte ni los deportistas rusos pero, por algún lugar habrá que empezar a sancionar un conflicto que nos puede llevar muy lejos.
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