Lectura fácil
La depuración del agua es clave para poder proteger los recursos hídricos, preservar los ecosistemas y poder avanzar en circularidad, el caso es que solo el 32 % de las aguas residuales mundiales reciben el tratamiento adecuado antes de volver al medio natural.
Es por ello que desde la ONU piden duplicar esfuerzos para poder alcanzar el ODS 6. Asimismo, se reclaman alianzas entre los gobiernos mundiales, el sector privado y las organizaciones filantrópicas, para utilizar las tecnologías y métodos innovadores.
Y es que contando con la desagregación y realizando análisis de volúmenes de aguas residuales y cargas de contaminación, se puede ayudar a identificar a contaminadores, minimizando así la liberación de productos químicos peligrosos y mejorar el tratamiento.
Haciendo una buena depuración del agua, se puede aplicar la regla de 'quien contamina, paga'
Además, cabe destacar que el informe de ONU Hábitat denuncia la falta de datos a nivel mundial de la depuración del agua, pues solo un 18 % de los países que representan a ese porcentaje de población mundial, aportan datos sobre el tratamiento que realizan a las aguas.
En cuanto a las aguas residuales industriales tratadas la proporción fue del 30 % y solo se pudo calcular para 14 países (que representan el 4% de la población mundial).
Los datos limitados disponibles, incluso entre países de altos ingresos, no permiten una estimación global o regional fiable, aunque en este ámbito industrial es donde la ONU denuncia que hay más contaminadores de los recursos hídricos.
La depuración del agua si cuenta con más datos de los hogares, donde 128 países aportaron informaciones, lo que representa un 80 % de la población mundial.
Según los informes, durante 2020, a nivel mundial, un 56 % de los flujos de aguas residuales domésticas recibieron algún tipo de tratamiento.
Pero, la depuración de aguas domésticas, según señala el informe, también presenta disparidades regionales, cosa que demuestra que el progreso en este aspecto es bastante desigual en todo el mundo.
Aumentar la tasa de depuración permitirá reutilizar el agua
Desde el informe destacan que, aplicando la regulación pertinente de depuración del agua, se reduciría la contaminación por vertidos, protegiendo así los escasos recursos hídricos.
De esta forma se avanza en circularidad, y además se frena la expansión de enfermedades transmitidas por el agua, además de mitigar y conseguir una adaptación al cambio climático.
Y es que en el contexto en el que nos encontramos, de sequías más frecuentes y agresivas, la depuración del agua y su reutilización es la solución para avanzar en el desarrollo sostenible.
Cabe destacar que la depuración del agua y su correspondiente monitorización, sirve como herramienta de alerta temprana y vigilancia de enfermedades, como hemos visto con la pandemia del covid, virus presente en las aguas residuales.
Añadir nuevo comentario