El OED presenta el primer estudio sobre el derecho a formar una familia de las mujeres con discapacidad

El Observatorio Estatal de la Discapacidad (OED), centro dependiente del Real Patronato sobre Discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, presentó un trabajo sobre el derecho de las mujeres con discapacidad a formar una familia.

Según informó el Observatorio, la investigación que se presentó se titula ‘El discurso de las mujeres con discapacidad en torno al ejercicio de la maternidad y su derecho a formar una familia’ y fue realizada el año pasado.

El estudio contribuye a aportar conocimiento sobre los derechos reproductivos de las mujeres con discapacidad desde su propia experiencia, en tanto que voz cualificada.

Tras la presentación le siguió un diálogo moderado por la coordinadora de la Fundación Cermi Mujeres, Isabel Caballero Pérez, en el que participarán la directora de Diversidad Familiar y Servicios Sociales del Ministerio, Patricia Bezunartea; la presidenta de la Fundación Cermi Mujeres, Concepción Díaz Robledo, y el director general de Derechos de las Personas con Discapacidad del Ministerio, Jesús Martín Blanco. Intervendrán asimismo dos mujeres con discapacidad, madres, las cuales ofrecerán sus testimonios acerca de cómo han vivido la experiencia de su maternidad.

La cooperación y participación de diferentes entidades y administraciones ha permitido conocer datos sobre el estado actual de los derechos para formar una familia de las mujeres con discapacidad

La participación directa de estas en la elaboración y conclusiones ha permitido aflorar las percepciones que tienen sobre aquellas situaciones o experiencias vitales de discriminación que posibilitan o no, el ejercicio de los derechos reproductivos, y particularmente las vivencias relacionadas con la maternidad y la formación de una familia.

La presentación del acto corrió a cargo del coordinador del OED, Luis Alonso, quien dio paso a la consultora experta de la Fundación Cermi Mujeres, Esther Castellanos Torres, que ha sido la entidad autora material de la investigación.

Esther Castellanos, se centró en la presentación en describir y analizar las principales conclusiones de esta publicación. En este punto, ha destacado que en la investigación “hay un marco normativo internacional que reconoce los derechos sexuales y reproductivos como parte de los derechos humanos de las mujeres, es decir, que cualquier normativa o política pública que se ponga en marcha debe tener en cuenta que las mujeres y niñas con discapacidad son sujetos sexuados, y que como tal tienen derecho a expresar y sentir su sexualidad y decidir en torno a su orientación libremente. Lo mismo cabe señalar respecto a sus derechos reproductivos”.

En la presentación del estudio se contó también con la experiencia en primera persona de dos mujeres con discapacidad que formaron una familia y son madres, Esther Muñoz y María Antonia Lirón, quienes explicaron cómo han ido confrontando desigualdades en el ejercicio de sus derechos sexuales y reproductivos a pesar de los diversos instrumentos de derechos humanos que se los reconocen.

Las barreras sociales y la falta de información hacen que sea muy difícil derribar estigmas y conseguir la igualdad

"Sigue habiendo barreras sociales asociados a la ausencia y o invisibilización de estadísticas oficiales y estudios científicos, específicos para cada tipo de discapacidad. Además, son numerosas las barreras a las que se enfrentan las mujeres con discapacidad frente a los servicios de salud, no solo físicas y arquitectónicas, sino también las de comunicación, falta de formación al profesional sanitario, etc", apuntó Castellanos.

Además, Castellanos puso sobre la mesa que el hecho de formar una familia con la maternidad biológica puede afectar a la salud física y mental de algunas mujeres con discapacidad.

De ahí el reclamo de la falta de información y las barreras sociales para poder contar con datos y que las mujeres reciban todos los detalles de especialistas según su caso. Y es que, según Castellanos “muchas discapacidades pueden ser exacerbadas por el estrés de la maternidad”.

La intervención sobre el derecho a la familia de la experta ha terminado con la exposición de algunas recomendaciones que vierte el estudio para la acción política que van desde la toma de conciencia y formación, pasando por servicios de atención a la salud sexual y reproductiva accesibles, hasta la participación de las mujeres y constitución de redes de apoyo, así como la corresponsabilidad social y el apoyo financiero.