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Con motivo de la celebración del Dia Europeo de los Derechos del Paciente el Instituto de Investigación y Formación en Salud (IFSASALUD) pretende llamar la atención de sociedad y las autoridades sanitarias, sobre cómo está influyendo negativamente el impacto del COVID-19 en la salud de las personas con enfermedades crónicas y/o poco frecuentes.
Además, el Instituto de Investigación pretende dar a conocer cómo puede seguir repercutiendo, de manera adversa, esta situación si continúa manteniéndose en el tiempo. Todo ello por el daño que puedan sufrir las estructuras asistenciales del sistema sanitario, lo que puede afectar a los derechos de las personas con enfermedades, normalmente muy graves y discapacitantes.
Durante el estado de alarma, la atención a los riesgos de salud para la población general ocasionados por la pandemia de COVID-19, ha primado, como no podía ser de otra manera, sobre el seguimiento habitual a los pacientes con enfermedades crónicas graves.
Esta crisis ha exigido una reordenación de los recursos sanitarios en toda España
El coronavirus ha tenido un impacto directo en los centros de atención primaria y en las consultas especializadas de los hospitales, dejando sin seguimiento terapéutico a los pacientes crónicos y con enfermedades poco frecuentes.
Todo ello supone para estos pacientes “angustia y miedo por el contagio de este virus” explica Esther Sabando, directora del Instituto. Hacemos referencia a población de riesgo, por lo que en todo momento se evita la exposición a lugares y espacios poco seguros. Los hospitales podrían verse perjudicados al no recibir la atención habitual.
La directora explica para GNDiario que hay personas adultas y niños con enfermedades severas, que han visto interrumpidas sus consultas, revisiones o tratamientos. En el caso de chicos que necesitan rehabilitación por una enfermedad neuromuscular, también se han visto afectados por esta situación desde el inicio de la pandemia.
Si un niño no realiza su rehabilitación durante 2 o 4 meses, equivale a que no tuviera desarrollo durante 4 años. También puede verse deteriorada la salud de niños con enfermedades respiratorias o que no puedan acceder a la medicación, añade la experta. Ante esta situación, Sabando solicita una estrategia por parte del Ministerio de Sanidad.
Por otro lado, las medidas tomadas por el Ministerio de Sanidad para la gestión de la vulnerabilidad de las personas en riesgo, dejan sin cobertura a los padres de niños con enfermedades graves. Si bien se protege, acertadamente, a los propios pacientes adultos mediante una baja laboral, con objeto de prevenir posibles aciagos contagios; en el caso de los niños que necesitan el cuidado de sus padres y el aseguramiento de un entorno seguro frente al virus; los padres no están siendo beneficiarios de estas medidas y se ven abocados a salir a trabajar con el riesgo de volver a casa con el virus, lo que puede ser fatídico para estos niños, explica la directora.
Para el 2020, estaba previsto realizar una jornada interdisciplinar entre: Administración, médicos y pacientes. En estas reuniones se intenta alcanzar consensos, para que en la medida de lo posible, atender los derechos de los pacientes, explica Sabando.
Sobre IFSASALUD
El Instituto para la Investigación y Formación en salud (IFSASALUD), tiene como finalidad favorecer la formación sanitaria, la investigación, así como la interlocución entre los diferentes actores sobre los derechos sanitarios de los pacientes. Se Informa y forma a los pacientes y profesionales sobre el marco sanitario y los derechos y deberes de los usuarios de la sanidad.
Trabajo coordinado entre los ámbitos sociales, sanitarios y jurídicos, con el propósito final de promover la calidad asistencial del sistema sanitario, así como su sostenibilidad.
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