La Madre Tierra, olvidada por completo por la sociedad

La Madre Tierra clama nuestra ayuda y nuestra puesta en marcha. Los climas son cada vez más extremos, los océanos siguen asfixiados, y las inundaciones e incendios forestales son algo cada vez más normal.

No acabamos de ver que la pandemia del coronavirus tiene que ver con la salud de nuestro dañado ecosistema. Pues el cambio climático, los cambios provocados por el ser humano y los crímenes contra la biodiversidad están ahí.

• Deforestación
• Cambios de uso del suelo
• Producción agrícola y ganadera intensiva
• Comercio ilegal con fauna y flora

Todo esto destruye el planeta y hace posible que nuevas enfermedades infecciones pasen de la naturaleza a los humanos, cosa que se conoce como enfermedades zoonóticas.

La Madre Tierra necesita una acción humana inmediata

Los datos del PNUMA, apuntan que cada 4 meses, una nueva enfermedad infecciosa emerge en los humanos, y que el 75 % de esas nuevas enfermedades proceden de los animales.

Nuestra salud, la de los animales y los ecosistemas está interconectada, un desequilibrio en unos provoca el caos en el resto. Y es que los ecosistemas están aquí para sustentar todas las formas de vida de la Tierra.

Y la salud de estos, depende directamente de la salud de la Madre Tierra y de los habitantes que hay en ella. Por ello, restaurar los daños ayudará a acabar con la pobreza, a combatir el cambio climático y a prevenir una extinción masiva.

Será el próximo 5 de junio, coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente, cuando se lanzará El Decenio de las Naciones Unidas para la Restauración de los Ecosistemas.

Esto tiene como objetivo salvar a la Madre Tierra, previniendo, deteniendo e invirtiendo en la degradación de los ecosistemas mundiales.

El caso es que la Madre Tierra necesita de todos y cada uno de nosotros. Todos sabemos que el coronavirus supone un riesgo para la salud pública y la economía mundial, pero también para la diversidad biológica.

Aún así, debemos de ser conscientes de que si el mundo cuenta con una diversidad de especies, a la que no se dañe ni manipule, se hace mucho más difícil que se propaguen los patógenos que causan caos como el que estamos viviendo.

Tenemos que percatarnos de que los cambios en la biodiversidad afectan al funcionamiento de los ecosistemas, dando lugar a alteraciones importantes en los bienes y servicios que proporcionan.

Aunque es necesario acabar con la pandemia, a largo plazo nos tenemos que centrar en salvar los ecosistemas y la biodiversidad

Los vínculos entre salud y biodiversidad dan lugar a posibles impactos en:

• Nutrición
• Investigación sanitaria
• Medicina tradicional
• Generación de nuevas enfermedades infecciosas
• Cambios significativos en la distribución de plantas, patógenos, animales y asentamientos humanos

La Madre Tierra continúa cada vez más deteriorada, pues se estima que alrededor de un millón de especies de flora y fauna están en peligro de extinción.

Por ello, es tan importante el Día Internacional de la Madre Tierra, porque debemos luchar para revertir los daños y evitar la aparición de nuevas pandemias y otros problemas como el cambio climático.