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No hay que echar demasiado la vista atrás para recordar la última vez que la sociedad mostró públicamente su desconocimiento sobre los síntomas de un trastorno del desarrollo. Fue hace un año, cuando muchas personas actuaron como 'policías de balcón' porque no entendían cómo algunas personas podían salir a pasear en pleno confinamiento, especialmente niños. En ese momento, un brazalete azul tuvo que hacer de agitador de conciencias. De este modo, la sociedad obligó a las personas con trastornos del espectro autista a señalarse como tal en su lucha por adaptarse a una vida lo más normalizada posible.
Hoy, en el Día Internacional del Síndrome de Asperger, toca dar voz a los colectivos que luchan cada día para mejorar las vidas de sus usuarios y familiares.
Síndrome de Asperger: un trastorno del espectro del autismo sin discapacidad intelectual asociada ni dificultades en aspectos formales del lenguaje
El hecho de que el síndrome de Asperger sea un trastorno sin marcadores físicos lleva a muchas personas a ser menos comprensivas. De ahí el nacimiento del brazalete azul.
Este trastorno del espectro autista conlleva una alteración neurobiológica durante el procesamiento de la infancia. Las personas afectadas muestran un aspecto e inteligencia normales y, a veces, esta última presenta valores superiores a la media. Sin embargo, estos pacientes se pueden caracterizar por un mayor o menor impedimento en las habilidades comunicativas y patrones repetitivos o restringidos de pensamiento y comportamiento.
El Asperger se manifiesta de forma diferente en cada individuo, pero todos tienen en común las dificultades para la interacción social, alteraciones en los patrones de la comunicación no verbal, inflexibilidad cognitiva y de comportamiento, complicaciones en la abstracción de conceptos, interpretación literal del lenguaje y de las emociones ajenas o propias.
El síndrome de Asperger es un trastorno del espectro autista que afecta a 3 de cada 1.000 nacidos vivos
Es un síndrome poco conocido por la población en general, teniendo los varones de tres a cuatro veces más probabilidades que las niñas a padecerlo. El síndrome de Asperger supone una discapacidad para entender el mundo de lo social, que da origen a comportamientos inadecuados originándoles a ellos y a sus familiares posibles problemas en todos los ámbitos.
Además, la pandemia ha trastocado la evolución de muchos de los usuarios. Al tratarse de personas que presentan dificultades para relacionarse, pasar tanto tiempo encerrados en casa hizo que tuviesen posteriormente que reaprender a hacerlo. De hecho, muchos de ellos no sentían la necesidad de salir a la calle ya que en casa se sentían plenamente a gusto sin la presión social que su trastorno les lleva a sentir. En el caso de los pacientes de menor edad, la adaptación a ir de nuevo al colegio fue uno de los aspectos más laboriosos.
¿Por qué se celebra el día del síndrome de Asperger el 18 de febrero?
El pediatra austríaco, Hans Asperger, observó, en el año 1944, a cuatro niños que tenían dificultades para integrarse socialmente. Aunque su inteligencia parecía normal, los menores carecían de habilidades no verbales, no mostraban empatía por los demás, eran torpes, hablaban de forma inconexa o demasiado formal y su interés lo centraban en un solo tema, que dominaba todas sus conversaciones. El doctor definió la patología como 'psicopatía autista'.
Sus observaciones, publicadas en alemán, no vieron la luz hasta el año 1981, cuando la doctora inglesa, Lorna Wing, difundió una serie de estudios de casos de niños que presentaban síntomas similares a los previamente analizados por el pediatra austríaco, por lo que lo denominó como el 'síndrome de Asperger'.
Desde ese momento, se celebra el Día internacional del Síndrome de Asperger cada 18 de febrero, coincidiendo con el nacimiento de Hans Asperger. Es necesario conmemorar esta fecha para dar visibilidad a estas personas y a sus necesidades, además de concienciar a la sociedad sobre las dificultades a las que se enfrentan a diario.
Síntomas y características del síndrome
En la mayoría de los casos, hay algo inusual en el comportamiento de los niños cuando estos cumplen 2 o 3 años. A diferencia de los pacientes de autismo, los afectados por el Síndrome de Asperger sí que desarrollan sus habilidades tempranas de lenguaje, no así su avance en las actividades motoras como gatear o caminar con torpeza.
El síntoma más generalizado es el interés obsesivo de los niños con un objeto o tema únicos, hasta el punto de excluir los demás. Se centran en el asunto que les fascina y quieren saberlo todo sobre él, girando todas sus conversaciones en torno a eso. Su experiencia, su nivel de vocabulario y sus patrones formales de lenguaje los hacen parecer pequeños maestros.
¿Cómo saber si un adulto tiene Asperger? ¿Y un niño? Este síndrome en los niños se diagnostica por su obsesión con determinados temas u objetos, por su lenguaje formal, su torpeza en las habilidades motoras y su aislamiento frente al resto de la sociedad. Su comportamiento tiende a ser inadecuado y todo lo que los demás dicen se lo toman de forma literal.
Este trastorno presenta problemas de socialización y comunicación también en la edad adulta. Algunos desarrollan síntomas psiquiátricos adicionales y trastornos.
#HazEspacio
Desde la Confederación Autismo España, organización de ámbito estatal que representa a las personas con TEA y sus familias en España, organizan un evento online en el marco de la campaña “Haz espacio”, que busca poner de manifiesto que las personas con Asperger se esfuerzan cada día por encajar en entornos inflexibles que no se adaptan a sus características y necesidades. En este sentido, el evento se centrará en reivindicar su derecho a aprender y a trabajar, es decir, a acceder a una educación de calidad que promueva su éxito académico y su desarrollo personal, pero que también facilite su acceso al mercado laboral.
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