El Día de Todos los Santos también está marcado por la arbitrariedad de la pandemia

El Día de Todos los Santos ya forma parte de la lista de festividades españolas que han acabado siendo modificadas y canceladas por culpa de la crisis sanitaria originada por la pandemia.

Este día es una fecha señalada en el calendario, y no sólo por recordar a nuestros seres queridos fallecidos (cosa que debemos de hacer todos los días), sino porque en estas fechas, muchos españoles aprovechaban para viajar, disfrutar de un tiempo de relax con amigos, o visitar a aquella familia que no vive en el mismo territorio.

Pero es más, ni siquiera el coronavirus va a dejar a aquellos que tengan la costumbre, visitar los cementerios con la normalidad que se hacía en estas fechas.

Durante la festividad de Todos los Santos en España se abrían los cementerios durante todo el día para poder visitar las tumbas y llevar flores a nuestros seres queridos fallecidos

Desgraciadamente la primera ola de la pandemia ya dejó bien claro que de ahora en adelante nada iba a ser igual. Despedirse de un ser querido, un acto sencillo pero que significa mucho para las personas, fue totalmente imposible en los meses de confinamiento.

Millones de personas han dejado este mundo en completa soledad, y ni siquiera sus familias han podido realizar el acto de darles el último adiós, como estábamos acostumbrados a hacer.

A muchos les quedaba la esperanza de poder visitar junto a otros familiares los cementerios españoles, con el propósito de decorar las tumbas o nichos como se hace en estas fechas en casi todos los lugares del territorio.

Tristemente, esto no va a poder ser. Pues las visitas a muchos cementerios durante este día han sido restringidas o muy reducidas.

Días antes de que llegase esta fecha, muchos camposantos han establecido un horario de visitas con previa cita, para reducir al máximo el aforo en estos lugares, que a pesar de ser abiertos también pueden contribuir con la expansión del COVID-19.

De hecho, los cementerios de la Comunidad de Madrid cuentan con un dispositivo especial para controlar al máximo los aforos en estos lugares. Cabe destacar que la vigilancia por drones es algo totalmente innovador y que está activo en los cementerios de esta comunidad.

En el Día de Todos los Santos hemos podido comprobar que muchas de las tumbas y nichos de los camposantos españoles ya cuentan con su ofrenda floral, pues la sociedad ha ido con antelación y siguiendo las pautas de cada lugar para poder honrar a sus seres queridos.

Vivir en otra comunidad diferente a la que se encuentran los restos mortales de un ser querido

Si ese es tu caso, como el de muchas personas, lo más seguro y recomendable es que no te muevas de tu Comunidad Autónoma, pues para el puente del Día de Todos los Santos de este año, muchas otras comunidades no permiten la entrada ni salida sin causa justificada.

Muchas personas aprovechaban el puente de Todos los Santos para viajar a los lugares en los que se encuentran enterrados sus familiares, y de paso, aprovechaban para reunirse con el resto de la familia a la que, por la distancia, no pueden ver durante el año.

Por poner un ejemplo, en mi caso, esta celebración siempre era motivo de alegría, pues mis abuelos (hace años fallecidos) tenían la costumbre de abrir la casa, acudir a misa y al cementerio con flores, y después recibir a montones de familiares y amigos para comer pastas y beber vino dulce.

Esta tradición ha ido pasándose a la generación de mi madre, y ha sido extendida a la mía y a la de mis primos. Llevar flores, recordar a los que ya no están y celebrar la vida de los que seguimos aquí se convertía en una fecha señalada en el calendario para honrar a los nuestros.

Tristemente, este año no podrá ser así. La pandemia nos está marcando a todos. Nuestros hábitos, costumbres y tradiciones han quedado totalmente paralizados, y es responsabilidad de todos que estas vuelvan a ponerse en marcha.

Aunque en el Día de Todos los Santos de este 2020 no podamos seguir con la tradición que cada uno lleva a cabo desde hace años, debemos de ser conscientes de que lo más importante para honrar a un ser querido que ya no está, es seguir manteniendo vivo su recuerdo, independientemente de si podemos o no acudir al cementerio donde se encuentran depositados sus restos mortales.