¿Qué es el ecodiseño y qué tiene que ver con que estén cambiando las tapas de los tetrabriks?

Todos somos cada vez más conscientes de la necesidad de generar menos residuos y de reciclarlos de forma más efectiva para evitar un colapso medioambiental mayor del que ya se viven en muchas zonas del planeta. Es en este ámbito donde surge el ecodiseño, un sistema que aboga por diseñar de forma más efectiva los envases y la presentación de los productos más consumidos, para reducir la cantidad de residuos que generamos.

Por supuesto, el ecodiseño también es el responsable de que hayamos visto a lo largo de la historia cambios en los envases de productos de consumo habitual. Así pues, en esta última oleada de nuevos formatos, especialmente centrados en atajar el grave problema que tenemos a nivel global con los plásticos y microplásticos, son las botellas plásticas y los tetrabriks en los que hemos empezado a notar los primero cambios, que se extenderán a la totalidad de las marcas, al menos dentro de la UE.

El ecodiseño en guerra contra el exceso de plástico

Desde la Unión Europea buscan alcanzar ciertos estándares de sostenibilidad para 2025, por lo que han iniciado muchos programas y proyectos para reducir el consumo de hidrocarburos, hacer más uso de energías renovables, y en el caso que nos atañe en esta ocasión, reducir de forma considerable los plásticos. Aunque esta labor ya lleva en marcha varios años, ahora se pretende dar un paso más y buscan hacerlo de la mano del ecodiseño.

Seguramente tu leche habitual ha cambiado el formato de tu tapa, es posible que te hayas peleado con el tapón de tu bebida favorita porque resulta que ahora va enganchada a la botella y se pone peleona. Todos estos pequeños cambios no son una mera casualidad y tiene su razón de ser. La principal es evitar que la tapa se desprenda del resto de la botella o tetrabrik, y esto se ha conseguido gracias al ecodiseño.

Pero, ¿Cuál es el motivo? Muy sencillo: evitar que todos esos pequeños tapones acaben desperdigados en lugares donde sin duda no deberían estar, como en entornos naturales, calles o simplemente mal reciclados. Como una solución sencilla que sigue las líneas del ecodiseño, diversas marcas ya han empezado a introducir estos tapones "que no se pierden" en sus envasados, de la misma forma que cada vez estos son reciclados.

Una utilidad doble

Más allá de evitar que estos pequeños tapones acaben desperdigados, favoreciendo al grave problema con los microplásticos, también existe en un segundo e importante motivo para que ahora los tapones permanezcan unidos a sus envases: el reciclado.

El hecho de que estos tapones permanezcan unidos también contribuye a que el reciclado de las botellas de plástico o el de los tetrabrik, sea mucho más sencillo y eficaz. Este es solo un ejemplo de cómo el ecodiseño, con pequeños cambios, puede contribuir enormemente a la reutilización, el reciclaje y por ende a la reducción de residuos en nuestro planeta.