Las escamas de mariposa evitarán la falsificación de billetes

Investigadores del Instituto de Física de Belgrado han descubierto el secreto de las escamas que proporcionan el color a las mariposas.

Desarrollan así la tecnología Teslagram, aquella que es capaz de revolucionar la industria antifalsificación empleando estructuras biológicas.

La particularidad microscópica de las escamas de mariposa es la clave para blindar tarjetas de crédito, llaves, documentos e incluso, obras de arte.

Cada escama es como una huella dactilar, pues posee relieves únicos, diferentes entre sí y de tamaño nano. Solo cuenta con cien micrómetros de largo y 30 de ancho.

Las escamas de las mariposas son incopiables

"Esas escamas tienen formas que las hacen únicas a cada una de ellas. Son tan pequeñas que no es posible copiarlas. Se trata de estructuras 3D, como pequeños hologramas 3D, que son únicos", explicó la doctora en física Marija Mitrovic Dankulov, directora del Centro de Innovaciones del Instituto de Física.

Otro de los efectos beneficiosos de estos microscópicos elementos, es que pocas mariposas pueden proteger un número elevado de objetos. La doctora expuso que, en una mariposa hay entre 100.000 y 200.000 escamas. Una de ellas es suficiente para transmitirle protección a un objeto.

Tras la muerte natural de la mariposa, se retiran las diminutas escamas, de forma que quedan enteras para ser aplicadas en aquello que se quiera proteger.

Además, la forma que tienen de adherirse en cada objeto, es seguro y diferente según el tipo de material, por ello resulta ser un gran desafío para los científicos.

Con las investigaciones, en un futuro será posible proteger de manera certera los billetes, evitando así la falsificación de dinero

De momento, Teslagram solo ha sido desarrollado para la protección de tarjetas de crédito, llaves de habitaciones de hotel y de coches, así como para la protección de una central nuclear o de organismo en los que se guardan datos delicados y otras instalaciones de gran importancia para un Estado.

El diminuto tamaño de las escamas, permite proteger objetos de arte, pues no altera el aspecto de una pintura o una escultura, lo que supone una garantía a los museos contra cualquier intento de falsificación de sus obras.

El día de mañana, con los avances y experimentaciones de esta particularidad de las mariposas, se podrán proteger los billetes, diferentes objetos de venta pertenecientes a marcas de moda e incluso medicamentos.

Este descubrimiento no tenía nada que ver con las conclusiones finales obtenidas

Durante el año 2010 se comenzó con una investigación sobre los colores de las mariposas. Los colores iridiscentes de las alas no se deben solamente a un pigmento, sino que son el efecto de la interacción de la luz con las nanoestructuras de las escamas, que cambian según el ángulo desde el que se las observe.

Esto dio la pista sobre la potencia de las escamas con respecto a la lucha contra la falsificación. Los estudios suponen un holograma irrepetible. Gracias a los análisis estadísticos realizados por los científicos del Instituto Serbio, se descubrió que no existen dos escamas iguales.

"La complejidad en una escama es tal que incluso una parte de la escama bastaría para proteger un objeto", manifestó el doctor en física Dimitrije Stepanenko, científico del Instituto de Física.

Stepanenko explica que ningún elemento de protección que se usa en la actualidad es tan eficaz como una escama de mariposa. "Si alguien descubre cómo imprimir un determinado holograma en papel moneda, puede hacer muchos billetes de 100 euros. Si descubre cómo copiar una escama, lo que creemos que es imposible, pero imaginemos la situación, sólo puede falsificar un billete, porque para otro la escama es diferente y entonces debería trabajar nuevamente desde el inicio"

Dimitrije Stepanenko opina que en el caso de los billetes, la escama será efectiva junto a otros sistemas de protección, pero en llaves, sería suficiente este método de seguridad.

Investigadores, físicos, biólogos, ingenieros de mecánica y programadores han trabajado en el desarrollo de Teslagram en honor del gran científico estadounidense de origen serbio Nikola Tesla

Se prevé que menos de un año, los primeros clientes comerciales cuenten con el sistema de seguridad basado en las llaves protegidas por dicha tecnología.

El lector de Teslagram, que reconoce el objeto protegido por la escama, también ha sido desarrollado por ese grupo de investigadores que han registrado la patente y la marca.

El añadido "gram" viene por analogía con los elementos altamente desarrollados y de amplio uso para la protección, como hologramas o kinegramas.