Los efectos adversos de los esmaltes semipermanentes en la salud de las uñas durante el verano

Durante el verano, cuidar de los pies se vuelve especialmente importante debido a factores como las quemaduras solares y el uso constante de chanclas, que pueden llevar a diferentes problemas. No obstante, el uso de esmaltes semipermanentes durante el verano también puede causar daños.

En respuesta, el Colegio de Podólogos de Galicia (COPOGA) ha proporcionado una serie de recomendaciones para asegurar un uso adecuado de este cosmético.

Los inconvenientes de los esmaltes semipermanentes durante el verano

En verano, pintarse las uñas es mucho más frecuente que en otras estaciones debido a que solemos mantener los pies descubiertos. Además, los esmaltes semipermanentes son una opción popular por su durabilidad prolongada en comparación con los esmaltados tradicionales, lo que permite mantener una apariencia impecable durante más tiempo sin necesidad de retoques frecuentes. Sin embargo, esta elección puede acarrear algunas consecuencias para nuestros pies.

Desde el Colegio de Podólogos de Galicia destacan la importancia de no abusar de estos productos debido a sus posibles efectos adversos en la salud de las uñas. Señalan que los esmaltes, especialmente los semipermanentes, pueden perjudicar la lámina ungueal, provocando que la uña se vuelva más delgada, pierda brillo y se rompa con mayor facilidad, e incluso, que se contraigan hongos en las uñas, conocidos como onicomicosis.

Las señales que muestran que tienes infección en las uñas

El Colegio de Podólogos de Galicia señala que “si se nota que la uña pierde su color normal, el cual debería ser similar al de las uñas de las manos, esto podría deberse a que el esmalte ha estado aplicado durante demasiado tiempo y podría ser un signo de alguna infección.”

El Comité de Prevención de Lesiones en Uñas ha proporcionado una serie de recomendaciones para evitar problemas en las uñas relacionados con el uso de esmaltes y otros productos cosméticos. Una de las principales sugerencias es optar por esmaltados especializados o lacas que no contengan productos tóxicos. Estos esmaltes están formulados para minimizar el riesgo de dañar las uñas y la piel circundante. Además, el uso de cremas hidratantes es fundamental para mantener las uñas y la piel de las manos bien nutridas e hidratadas, lo que contribuye a su salud general y apariencia.

¿Cómo eliminar el esmalte?

Otro aspecto crucial señalado por los especialistas es la forma correcta de eliminar el esmalte. Es esencial asegurarse de que todo el esmalte se retire completamente, ya que dejar restos puede crear un ambiente propenso para la proliferación de hongos. Los hongos en las uñas pueden causar una variedad de problemas, como decoloración y debilidad. Por lo tanto, al despintar las uñas, se debe hacer de manera meticulosa para asegurar que no queden trazos de esmalte.

Además, se recomienda permitir que las uñas descansen después de haber sido despintadas. Durante este período de descanso, las uñas tienen la oportunidad de ventilación adecuada, lo que facilita su recuperación y mejora su salud. El tiempo sin esmalte permite que la uña respire y se hidrate correctamente, evitando la acumulación de humedad y productos que puedan dañar su estructura. Este enfoque contribuye a mantener las uñas fuertes y en óptimas condiciones para futuros tratamientos.

El corte de uñas

Aparte de tener cuidado con los esmaltes, es fundamental recordar que para evitar problemas como el dolor y las infecciones en la piel de los dedos, es necesario hacer un corte adecuado de las uñas. Si no se realiza el corte correctamente, es posible que las uñas se claven en los laterales, lo cual puede generar molestias y aumentar el riesgo de infecciones. En caso de tener dudas sobre cómo realizar este procedimiento correctamente o si se presentan problemas persistentes, se recomienda consultar con un podólogo o podóloga, quienes son especialistas en el cuidado de los pies y podrán ofrecer orientación y soluciones adecuadas.