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La misión ExoMars es un proyecto de la Agencia Espacial Europea (ESA) diseñado para investigar la posibilidad de vida pasada en Marte. Se compone de dos fases principales: la primera fase, lanzada en 2016, incluyó el Orbitador de rastreo de gases (TGO) y el módulo de aterrizaje Schiaparelli. La segunda fase, planeada para la década de 2030, constará de un rover y un módulo de superficie, cuya misión será explorar la superficie marciana con mayor detalle en busca de evidencia de vida pasada.
Inicialmente, la misión ExoMars enfrentó contratiempos cuando Roscosmos, la agencia espacial rusa, cesó su colaboración con la ESA debido a la invasión de Ucrania. Esta ruptura dejó a la ESA sin acceso al rover, ya que Roscosmos era responsable de proporcionar la plataforma de aterrizaje necesaria para enviar el instrumento a Marte. A pesar de esto, David Parker, Director de Exploración Humana y Robótica de la ESA, mantuvo la esperanza de reanudar la misión en el futuro, expresando"espero que nuestros Estados Miembros decidan que este no es el finalde ExoMars, sino el renacer de la misión, y tal vez nos sirva como detonante para desarrollar una mayor autonomía europea". Ahora, después de dos años, la ESA ha reactivado ExoMars gracias a un contrato con Thales Alenia Space.
ExoMars 2028 se convierte en un paso crucial hacia la búsqueda de vida en Marte
La ESA ha suscrito un acuerdo significativo con Thales Alenia Space por un valor de 522 millones de euros, destinado a la fabricación de componentes fundamentales para la misión ExoMars 2028. Esta ambiciosa misión tiene como objetivo investigar la presencia o existencia pasada de vida en el planeta rojo.
Este acuerdo, estructurado en distintas fases,abarca labores de mantenimiento de los vehículos creados para la misión, así como el desarrollo del crucial módulo de entrada, descenso y aterrizaje en Marte (EDLM). Con los objetivos científicos originales de la misión sólidamente establecidos, el plan se centra en lograr descubrimientos sin precedentes sobre la evolución de Marte, el sistema solar y posiblemente la vida misma, mediante la perforación y una exploración más exhaustiva de la superficie marciana.
Desafíos
La próxima misión tiene programado su lanzamiento entre octubre y diciembre de 2028 desde el Centro Espacial Kennedy en Florida, Estados Unidos. Esta misión desplegará un rover equipado con los instrumentos más sofisticados para la exploración autónoma de la superficie de Marte. Enfrentándose a desafíos científicos y tecnológicos, la misión ampliará los límites de la innovación en la exploración espacial, abordando desde el desarrollo de materiales avanzados para la protección térmica durante la entrada en la atmósfera, hasta las complejidades del software de navegación y control.
Además, uno de los propósitos fundamentales de la misión es buscar bacterias en el subsuelo marciano, ya sea en forma de organismos vivos o fosilizados. Este hallazgo constituiría una prueba contundente de la existencia pasada o presente de vida en el planeta rojo.
El plan contempla el envío de un rover europeo que se moverá de manera autónoma por la superficie de Marte, con la llegada prevista para el año 2030. Este vehículoestará equipado con una herramienta perforadora diseñada para extraer muestras del suelo marciano, alcanzando profundidades de hasta dos metros.
ExoMars equipado con este instrumental, el rover recolectará y analizará muestras con el fin de detectar indicios de vida pasada o presente. Este proceso constituye un paso crucial en la búsqueda de respuestas sobre los orígenes del sistema solar por parte de la humanidad.
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