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El Corredor Filadelfia es una franja de tierra de 14 kilómetros de largo y 100 metros de ancho que forma la frontera entre Egipto y la Franja de Gaza. Esta zona se extiende desde la costa del mar Mediterráneo hasta el Paso Karem Shalom, incluyendo el Paso de Rafah.
La denominación de "Corredor Filadelfia" data de 1978, cuando Egipto e Israel firmaron el acuerdo de Camp David. Este acuerdo estableció corredores de seguridad, incluyendo el Corredor Filadelfia, que debía ser una "zona de amortiguamiento desmilitarizada" controlada por fuerzas israelíes.
Importancia en el conflicto Israel-Hamás
Actualmente, el Corredor Filadelfia es un punto estratégico clave en el conflicto entre Israel y Hamás. En mayo de 2024, el ejército israelí tomó el control operativo de esta área, arrebatando el poder a Hamás en este enclave estratégico. Los ciudadanos palestinos no pueden cruzar hacia Egipto, lo que ha intensificado la tensión en la región.
La medida ha tenido un impacto significativo en el conflicto, con continuos bombardeos y bajas en Gaza. Este control es fundamental para Israel en las negociaciones de rehenes y en su estrategia militar general.
Evolución histórica y contexto actual
Durante los años 90, Israel intentó negociar una autonomía para Gaza y Cisjordania bajo la Autoridad Palestina, pero estas negociaciones fracasaron.
En 2005, se firmó el Acuerdo Filadelfia que permitía a Egipto patrullar la frontera con 750 guardias. Sin embargo, en 2007, tras la victoria electoral de Hamás, el grupo palestino tomó control de Gaza y comenzó a construir túneles bajo el Corredor Filadelfia para contrabando de armas. Estos túneles se convirtieron en un punto crítico, ya que Netanyahu considera que fueron clave en el ataque terrorista del 7 de octubre. La continua disputa por el control de este corredor subraya su importancia estratégica en el conflicto en curso.
El conflicto actual entre Israel y Hamás ha escalado significativamente desde octubre de 2023, cuando Hamas lanzó un ataque sorpresa desde la Franja de Gaza contra Israel. Este ataque, que incluyó incursiones masivas y ataques con cohetes, marcó uno de los episodios más violentos en años recientes y resultó en la muerte de numerosos civiles israelíes y palestinos. Israel respondió con una serie de ataques aéreos y una invasión terrestre en Gaza, lo que llevó a una intensificación del conflicto.
Desde entonces, la situación ha estado marcada por continuas hostilidades, incluyendo bombardeos, incursiones y una creciente crisis humanitaria en Gaza. Además, el conflicto ha tenido repercusiones en la política interna de Israel y ha influido en las relaciones internacionales, incluyendo tensiones con otros países de la región como Turquía y Qatar, quienes han mostrado apoyo a Hamás.
En medio de la violencia, han surgido intentos de negociación, principalmente mediadas por Qatar, para liberar a los rehenes tomados por Hamas, incluyendo ciudadanos estadounidenses. Sin embargo, hasta ahora, los esfuerzos por alcanzar un alto al fuego sostenible han sido infructuosos, y la situación sigue siendo extremadamente tensa y peligrosa para todas las partes
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