Gianni Infantino no sabe cómo defender el Mundial cada dos años y su explicación termina en bochorno

Las declaraciones del presidente de FIFA, Gianni Infantino, han dejado claro lo que supone el fútbol para los verdaderos “peces gordos”. El balón no es más que el principio del “negoci” que dirían los empresarios catalanes. Infantino no sólo como presidente de la FIFA sino como ciudadano europeo, ha dado una mala imagen en Bruselas, la casa de todos.

¿Por qué? Porque para defender la idea del Mundial cada 2 años ha tenido que decir que “hay que darles la esperanza de que no tengan que cruzar el Mediterráneo para poder tener quizás una vida mejor”. No hay nada más asqueroso que ver estas declaraciones. Tanto FIFA como UEFA se llenan los bolsillos gracias a discursos tolerantes que terminan enfangados por un discurso populista que firmarían Donald Trump o Santiago Abascal sin cambiar una sola coma.

Gianni Infantino debió saber que existen otros caminos para que África pueda salir de ello

El fútbol debe ser un activo inmaterial para nuestra sociedad. No solo porque es una alternativa de deporte saludable sino, porque instituciones como la FIFA y la UEFA deberían realizar papeles institucionales como realiza el COI. La primera y última Copa del Mundo celebrada en territorio africano fue aquella de 2010. Para los españoles, inolvidable. El gol de Iniesta. Minuto 116 y los gritos de Camacho en el Soccer City.

Desde el día después, ni Joseph Blatter, su antecesor, ni Gianni Infantino, se han preocupado de lo que se vive en el continente africano. Es triste decir esto pero, el efecto África se terminó cuando derribamos el decorado del Waka Waka de aquel verano de 2010. Nadie volvió a apostar por África salvo los propios africanos y, entregamos la soberanía de celebrar algo tan grande como una Copa del Mundo a Qatar.

La FIFA y su presidente, Gianni Infantino, todavía no se han pronunciado sobre lo que, tiene pinta que será el mayor genocidio laboral a nivel Mundial: más de 7.500 personas fallecieron en la construcción de un estadio. Sin embargo, eso parece no preocuparle a Gianni y tras el Mundial 2026 de Canadá, México y USA, estaría poniendo los flecos para 2028.

¿Por qué en 2028 no se lleva el Mundial a Marruecos o Túnez?

La FIFA tiene un altavoz de oro. Sin embargo, por ese altavoz lo único que han echado es mierda. Si la intención de Gianni Infantino finalmente es potenciar el continente africano para que sus habitantes “no vayan nadando todo el Mediterráneo” tiene una oportunidad de oro: darle un evento de estas características a algún país africano como en su día se hizo con Sudáfrica.

Marruecos, Túnez, Argelia, Camerún, Mali… Esos países estarían encantados de recibir a las grandes estrellas del fútbol mundial. Sin embargo, aunque la propuesta pueda calar en algunos jugadores, la gran mayoría se han opuesto a una gran competición cada 2 años porque, esto supondría cargar de partidos a todos los jugadores temporada tras temporada y, el Mundial no se vería como un evento deportivo único.