Lectura fácil
Desde hace algún tiempo se ha generado un debate común acerca de la duración de las jornadas laborales en España. Ahora, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha puesto de nuevo este tema sobre la mesa alegando un cambio en el cual se cobren los mismos salarios trabajando menos horas.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2022 hubo un repunte del empleo que dio un aire de esperanza para este 2023. Sin embargo, afirman que reducir las jornadas laborales mejoraría el desarrollo tanto de empresas como de trabajadores.
De hecho, algunas pequeñas y medianas empresas ya han puesto en marcha planes para reducir la jornada laboral de sus trabajadores a 32 horas. Por lo tanto, esto no es una idea novedosa en el empleo que no se haya puesto a debate en la sociedad. Aunque en este 2023 parece que este cambio se presenta con más fuerza.
En España se presentan dos posibles jornadas laborales, según el Ministerio de Trabajo, que podrían implantarse muy pronto: jornada flexible y jornada reducida. Los partidarios de cada una de ellas defienden su posición alegando que esto aumentaría la productividad, y mejoraría la conciliación familiar.
Estas son las ventajas y los inconvenientes de las nuevas jornadas laborales: jornada laboral flexible y la jornada laboral reducida
La jornada laboral flexible
La jornada laboral flexible consiste en que el trabajador escoge su horario laboral en función de su vida personal. De esta forma, los empleados pueden adaptar las horas de trabajo a sus necesidades personales o familiares. Las horas se reparten en una franja más amplia y se subdividen en varias etapas.
La consecuencia es que no hay jornadas laborales tan largas ni horarios fijos. El objetivo de este modelo es que el trabajador enfoque sus objetivos adaptando el horario laboral según el momento más productivo del día. Normalmente se plantea este modelo para trabajadores con cargas familiares y en el sector tecnológico.
La principal ventaja que ofrece la jornada laboral flexible es que permite la conciliación familiar del trabajador. El empleado trabaja en las horas donde es más eficaz y está más concentrado, lo cual aumenta la productividad. La empresa obtiene así un aumento del compromiso de sus trabajadores.
Los partidarios de la jornada laboral flexible aseguran que reduce el ausentismo laboral. Pero al mismo tiempo, el modelo ofrece algunas dudas, ya que el trabajador pierde vinculación con el resto del equipo. Para los jefes es más difícil gestionar un grupo con horarios flexibles y discontinuos.
También hay desventajas para el empleado, ya que según los expertos aumenta el nivel de estrés. Esto sucede por la dificultad de gestionar un horario propio con la responsabilidad de cumplir los objetivos.
La jornada reducida
La jornada reducida es un proyecto que lleva tiempo planteándose en España y que de momento no ha cuajado. El plan piloto no funcionó porque la reducción de horas conllevaba una bajada del salario y los trabajadores lo rechazaron. El objetivo a largo plazo es trabajar menos horas con el mismo sueldo.
El plan piloto en España consistía en bonificaciones a las pequeñas y medianas empresas que aplicaran la jornada de los 4 días. Para recibir las ayudas del Gobierno, las pymes tenían que reducir la jornada de sus trabajadores al menos un 10 %. De momento, la propuesta ha quedado en standby.
La principal ventaja de este modelo es que el trabajador tiene más tiempo libre y aumenta la productividad. El empleado puede enfocarse en sus objetivos de una forma más eficiente y con más capacidad de concentración. Los defensores de este modelo aseguran que incrementa la predisposición al trabajo.
Supone un problema para las empresas con servicio de atención al cliente. Aquellas que han intentado aplicar esta jornada han visto cómo aumentaba la insatisfacción de los clientes.
Añadir nuevo comentario