Los trabajadores con jornadas inferiores a 38,5 horas se duplican en lo que va del siglo, según nuevos datos

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29/01/2025 - 11:56
Personas en una oficina | Foto de 123RF/peopleimages12

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En los últimos años, España ha experimentado un significativo cambio en la estructura de las jornadas laborales, especialmente en aquellos trabajadores amparados por convenios colectivos. Según un estudio de Cepyme, entre los años 2000 y 2022, la proporción de trabajadores con jornadas laborales inferiores a las 38,5 horas semanales se ha más que duplicado, pasando del 20,1 % al 44, 5%. Este aumento refleja un cambio en las preferencias laborales y el impacto de las políticas laborales de los últimos años.

Reducción de la jornada: beneficios y desafíos para los trabajadores

Este incremento en la proporción de trabajadores con jornadas más reducidas podría estar relacionado con los esfuerzos del Ministerio de Trabajo y Economía Social por reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales. Si esta medida se hiciera efectiva, casi la mitad de los trabajadores se verían beneficiados por una reducción de una hora o menos en sus jornadas laborales. Sin embargo, el aumento de trabajadores con jornadas reducidas ha tenido un impacto directo en la reducción de las jornadas largas.

En 2000, el 18,8 % de los trabajadores tenía jornadas superiores a las 39,5 horas, mientras que en 2022 este porcentaje cayó a solo el 7,9 %, lo que demuestra una tendencia clara hacia la reducción de horas laborales.

Sectores con mayor resistencia a la reducción de la jornada laboral

A pesar de esta tendencia general, algunos sectores siguen mostrando resistencia a la reducción de la jornada laboral. En tres sectores clave —hostelería, comercio y agroganadería— las jornadas laborales siguen siendo de al menos 39 horas semanales, lo que refleja una desalineación con los objetivos de reducir las horas de trabajo de manera generalizada. Además, otras ramas de actividad como actividades inmobiliarias, servicios administrativos y profesionales también mantienen un promedio de 37,5 horas.

En contraste, hay sectores como agua y saneamiento, finanzas y seguros, información y comunicaciones, y administraciones públicas donde las jornadas pactadas son inferiores a las 37,5 horas. Estos sectores no se verían afectados mayoritariamente por la propuesta de reducción de la jornada laboral impulsada por el Ministerio de Trabajo.

Las implicaciones para las PYMES y la productividad

Cepyme, la patronal de las pymes, subraya que la reducción de la jornada laboral debe tener en cuenta las diferencias sectoriales y las realidades de las pequeñas y medianas empresas. La patronal advierte que la productividad de las pymes ha mostrado una tendencia a la baja en los últimos trimestres. Esta caída de la productividad ha generado preocupaciones sobre cómo la reducción de horas laborales podría afectar aún más a las empresas más pequeñas, donde los márgenes de ganancias ya son ajustados.

La reducción de la jornada laboral, aunque bien intencionada, podría traer consigo un aumento en los costes laborales por unidad vendida, especialmente si la productividad no mejora. Esto podría afectar negativamente la capacidad de inversión de las empresas y, en última instancia, su competitividad en el mercado.

Tras varios meses de negociación, la propuesta de reducción de la jornada sigue siendo un tema de debate. La medida, que busca establecer una jornada laboral de 37,5 horas semanales, aún no ha logrado el consenso entre los distintos actores políticos y empresariales. Las diferencias entre las posturas del Ministerio de Trabajo y la de la CEOE, así como la complejidad del debate parlamentario, dejan abierta la pregunta sobre el futuro de esta medida y su impacto en los trabajadores y las empresas de España.

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