12/12/2017 - 09:56
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Tokio, 12 dic (EFE).- La Bolsa de Tokio cerró hoy mixta tras una sesión volátil en la que los inversores decidieron actuar con cautela antes de la reunión mensual de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed), donde se espera que decidan sobre una nueva subida de tipos.
El índice de referencia Nikkei cayó 72,56 puntos, un 0,32 %, y quedó en los 22.866,17 puntos, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, avanzó 1,74 puntos, un 0,1 %, y cerró en las 1.815,08 unidades.
El parqué tokiota abrió la negociación prácticamente plana debido a que los inversores optaron por la recogida de beneficios tras las ganancias del lunes, cuando el Nikkei cerró en su mejor nivel en 26 años y las ganancias fueron generalizadas en Nueva York.
La plaza nipona tornó en pérdidas en el segundo tramo a medida que la precaución crecía antes del inicio de la reunión mensual de dos días de política monetaria del banco central estadounidense, en la que se espera que decida su tercera subida de tipos del año.
El temor de que la baja inflación registrada recientemente en Estados Unidos dé motivos a la Fed para desacelerar el ritmo de las alzas en 2018, así como la debilidad mostrada hoy en otros mercados asiáticos, fueron algunos de los motivos que influyeron en la caída del principal selectivo, indicaron los analistas locales.
La industria alimentaria y la de los instrumentos de precisión lideraron las pérdidas, mientras que la minería y la banca fueron los que cosecharon las principales ganancias.
El sector financiero cerró al alza gracias a un aumento del rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos. Entre los que avanzaron estuvieron los grupos financieros Mitsubishi UFJ y Nomura, que subieron un 2,3 % y un 1,2 %, respectivamente.
La inmobiliaria Sun Frontier Fudosan se disparó un 16 % tras anunciar el lunes una emisión de nuevas acciones por oferta pública.
En la primera sección, 1.024 valores retrocedieron frente a los 910 que avanzaron, mientras que 113 terminaron el día sin cambios.
El volumen de negocio ascendió a 2,510 billones de yenes (18.797 millones de euros), frente a los 2,363 billones de yenes (17.691 millones de euros) de la víspera.
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