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Barcelona, 2 feb (EFE).- La Fundación Bancaria La Caixa ha destinado en el último año 510 millones de euros a obra social, lo que ha permitido impulsar cerca de 50.000 iniciativas de las que se han beneficiado más de 11 millones de personas.
La entidad que preside Isidre Fainé, que gestiona de forma directa la Obra Social y agrupa en CriteriaCaixa todas las participaciones accionariales del Grupo La Caixa, incluida CaixaBank, ha constatado "avances destacados" en sus tres ámbitos prioritarios de actuación, como son el social, la investigación y la divulgación de la cultura y el conocimiento.
La Fundación, que contempla una inversión superior a los 2.000 millones en el período 2016-2019, ha impulsado proyectos como CaixaProinfancia, que desde hace diez años promueve la inclusión social de niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad.
Durante 2017, esta iniciativa ha atendido a más de 62.000 menores procedentes de hogares en riesgo de exclusión.
Otra de las líneas de actuación prioritarias de la Fundación Bancaria La Caixa es el fomento del empleo, y en este sentido tiene en marcha el programa Incorpora, que ha celebrado su décimo aniversario superando los 30.600 puestos de trabajo facilitados a personas en situación de vulnerabilidad a lo largo del último año, frente a los 28.920 del año anterior.
En el ámbito de la salud, la entidad ya desarrolla su Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas en 123 centros sanitarios y gracias a él en 2017 un total de 24.094 pacientes han recibido apoyo psicosocial, así como 29.555 familiares.
Otro de los retos de la entidad es facilitar el acceso a la vivienda. Para ello, la Fundación y CaixaBank cuentan conjuntamente con un parque de más de 32.000 pisos, cuyas rentas mensuales se sitúan a partir de los 85 euros y que están a disposición de las personas con menos recursos.
En el ámbito de las personas de más edad, la entidad cuenta con el programa Personas Mayores, que ha contado en el último año con 821.532 participantes en propuestas sociales, culturales, de salud y tecnológicas dirigidas a fomentar el envejecimiento activo.
En el campo educativo, la Fundación Bancaria La Caixa impulsa el programa EduCaixa, que ha llegado a más de 2,4 millones de alumnos de 8.300 escuelas españolas, y concede diferentes tipos de becas.
La entidad española, que ahora tiene su sede social en Palma de Mallorca, ha consolidado también en el último año su colaboración con entidades de referencia internacional como la Fundación Bill & Melinda Gates, para promover la vacunación infantil en los países en vías de desarrollo; UNICEF, con el objetivo de reducir la mortalidad infantil causada por la neumonía, y ACNUR para mejorar las condiciones de vida de los refugiados.
Además, fruto del acuerdo con el banco portugués BPI, ahora en manos de CaixaBank, la Fundación Bancaria La Caixa expandirá su obra social a Portugal, donde prevé destinar hasta 50 millones de euros anuales a través del despliegue de los proyectos más emblemáticos de la entidad.
La apuesta por la investigación médica es otro de los pilares del actual plan estratégico de la Fundación, con una inversión superior a los 90 millones de euros en el cuatrienio 2016-2019.
En esta línea, en el último ejercicio ha intensificado la promoción del avance científico con el apoyo a proyectos centrados en la investigación del Alzheimer, el sida, las enfermedades neurodegenerativas o las afecciones cardiovasculares.
Por último, la oferta cultural, científica y educativa de la Obra Social La Caixa en toda España ha superado los 6 millones de visitantes durante el año 2017, aumentando en un 13 % respecto al ejercicio anterior.
De cara a 2018, la Fundación La Caixa incrementará su presupuesto hasta los 520 millones y mantendrá el foco en programas sociales y en ayudar a los colectivos más vulnerables promoviendo la igualdad de oportunidades.
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