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Cuarenta personas han muerto y más de 20 han resultado gravemente heridas en tiroteos en dos mezquitas de Christchurch, Nueva Zelanda.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, describió los incidentes como un ataque terrorista y uno de los "días más oscuros" del país.
Tres hombres y una mujer están detenidos, dijo el comisionado de policía Mike Bush, pero advirtió que más sospechosos podrían estar en libertad.
El Primer Ministro de Australia, Scott Morrison, dijo que uno de los detenidos era ciudadano australiano. Describió al sospechoso como un "terrorista violento de extrema derecha".
Los testigos dijeron a los medios de comunicación locales que corrieron para salvar sus vidas y vieron a personas sangrando en el suelo fuera de la mezquita de Al Noor.
Una segunda mezquita en el suburbio de Linwood ha sido evacuada, y el Comisionado de Policía Mike Bush dijo que se registraron "múltiples fatalidades" en dos lugares. Hasta ahora, han surgido muchos menos detalles del segundo sitio.
La policía intercepta explosivos en un vehículo
La policía hace hincapié en que la situación sigue evolucionando y no ha dicho cuántas personas han resultado heridas o muertas. Dijeron que habían respondido a "una serie de IEDs (artefactos explosivos) acoplados a los vehículos, que también paramos".
Las autoridades han aconsejado a todas las mezquitas de la ciudad que cierren hasta nuevo aviso, diciendo que se trata de un acto de violencia sin precedentes. También se ha visto a policías armados en la escuela secundaria Papanui de Christchurch, que ha sido acordonada.
Todavía no se sabe cuántos tiradores había, pero el Herald informa que se cree que un pistolero es un australiano que ha escrito un manifiesto que describe sus intenciones. En el defiende la ideología de extrema derecha y la ideología antiinmigrante.
Han aparecido imágenes tomadas por un tirador, que fueron transmitidas en directo por Instagram mientras disparaba a las víctimas en una mezquita. La policía pidió al público que no compartiera el material "extremadamente angustioso" en línea.
Facebook dijo que había eliminado las cuentas de Facebook e Instagram del tirador, así como cualquier apoyo expresado para ese crimen.
¿Qué pasó en las mezquitas?
La secuencia de los acontecimientos sigue siendo poco clara y ha llegado en su mayor parte a través de informes de testigos presenciales a los medios de comunicación locales.
El primer informe de un ataque provino de la mezquita Al Noor, situada en el centro de Christchurch, a lo largo de Deans Avenue, frente a Hagley Park. Los testigos informaron haber visto a personas sangrando en el suelo fuera del edificio.
Un superviviente dijo a TV New Zealand que vio a un pistolero disparar a un hombre directamente en el pecho. Según se informa, el atacante se dirigió a la sala de oración de hombres de la mezquita y luego se trasladó a la sala de mujeres. "Lo que hice fue básicamente esperar y rezar, Dios por favor, deja que este tipo se quede sin balas", dijo el testigo. "Vino a este lado, disparó a este lado, fue a otra habitación y fue a la sección de señoras y les disparó. Acabo de oír que una de las señoras ha muerto."
Un testigo, que no deseaba ser nombrado, dijo a la agencia de noticias AFP que vio a un hombre herido de bala en la cabeza y oyó disparos rápidos. "Escuché tres disparos rápidos, y al cabo de unos 10 segundos volvió a arrancar, debe haber sido automático, nadie podía apretar un gatillo tan rápido. Entonces la gente empezó a salir corriendo. Algunos estaban cubiertos de sangre."
Una segunda mezquita en el suburbio de Linwood también ha sido evacuada, y el comisionado de policía dijo que se registraron "múltiples fatalidades" en dos lugares. Sin embargo, hay muchos menos detalles que emergen de allí.
Múltiples víctimas han sido llevadas al Hospital de Christchurch, donde hay una fuerte presencia policial. Anteriormente, la policía despejó la Plaza de la Catedral, donde miles de niños y niñas habían estado organizando una manifestación para que se tomaran medidas en relación con el cambio climático.
El Comisionado de Policía Mike Bush dijo: "La policía está respondiendo con toda su capacidad para gestionar la situación, pero el entorno de riesgo sigue siendo extremadamente alto."
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