El Mindfulness es la mejor forma de relajación para los padres de niños con discapacidad

Cuidar a un hijo no es una tarea sencilla, y mucho menos cuando se trata de un hijo con discapacidad, ya que supone una mayor atención. Eso hace que muchas familias sufran episodios de estrés y ansiedad. Si tú también pasas por una situación similar, déjanos decirte que el Mindfulness es tu mejor aliada.

¿A qué nos referimos con el Mindfulness?

Mantener en orden tu día a día se convierte en una odisea cuando formas una familia, es decir, cuando tienes la compañía de los hijos. Todos somos conscientes de que los niños traen alegría al hogar, pero en muchas ocasiones pueden causar situaciones de desesperación para los padres.

Así gestionar el cuidado de un hijo es algo bastante complicado, pero debemos destacar la situación del cuidado de los hijos con discapacidad. En estos casos las familias se ven inmersas en una atención prioritaria hacia ellos, un hecho que les causa situaciones de estrés y ansiedad.

Sin embargo, existen algunas formas de poder combatir el estrés en estas situaciones, y es gracias a la técnica del Mindfulness.

El Mindfulness es una técnica de relajación que se basa en prestar atención de manera consciente al momento presente. Se trata de una forma de relajación que también pueden poner a prueba los niños.

Gracias a este tipo de técnicas, la persona aprende a vivir el momento presente y no el pasado o el futuro, lo que suele ocurrir en casos de familias de hijos con discapacidad. Además, ofrece beneficios como: la mejora de la memoria, la atención, la reducción de la ansiedad, mejora la calidad del sueño e incluso incrementa las habilidades sociales.

¿Cómo puedo alcanzar esta técnica de una manera positiva?

Lograr una técnica perfecta no es imposible, pero es importante recalcar que el Mindfulness dependerá de la persona que lo practique. El tiempo total que debe durar la práctica ronda los 15 y 30 minutos. Debes tener en cuenta lo siguiente:

• Escoger un momento oportuno.
• Practicar la técnica a diario.
• Establecer un lugar y procura hacerlo en solitario.
• Mantener una postura idónea, tumbado o sentado.
• Utiliza el temporizador para controlar el tiempo.

Además de realizar la técnica cuando te encuentres solo en tu casa, también puedes hacer mientras estás cocinando o de camino al trabajo. Para ello solo tendrás que concentrarte en el momento y no pensar en otro asunto.

Una técnica que ha llegado para quedarse

El Mindfulness es una técnica de relajación que apareció hace unos años y que muchos padres ya practican en su día a día. Es muy importante saber que esta técnica requiere una concentración máxima y que se debe practicar de manera diaria, no en días sueltos.

Además de relajarnos, el mindfulness nos ayudará a establecer cambios estructurales y funcionales en nuestro cerebro, lo que hará que nuestras emociones aumenten y que se reduzca la sensación de estrés o ansiedad.

¿A qué esperas para ponerlo a prueba? ¡Párate a pensar y dale un gusto a tu mente!