Este hecho se respalda, por ejemplo, con cifras que muestran el enorme impacto de la contaminación en la salud, ya que 4,2 millones de personas mueren de forma prematura cada año por contaminación del aire.
La biodiversidad forestal, a pesar de ser un factor determinante en la lucha contra el cambio climático en extensas zonas del planeta, podría ser poco relevante en determinadas zonas.
Los cultivos son susceptibles de sufrir episodios climáticos extremos, muchos de los cuales son cada vez más frecuentes e intensos debido al cambio climático.