Los investigadores vincunan por primera vez los ríos de montaña alimentados por glaciares con tasas más altas de descomposición de material vegetal, un proceso importante en el ciclo global del carbono.
No es una predicción habitual, pero los efectos de la llamada ciclogénesis explosiva suelen tener efectos devastadores, similares a los de un ciclón tropical.
Según un estudio liderado por la Estación Biológica de Doñana, esta expansión puede poner en peligro la biodiversidad de la flora local en entornos naturales.
Proteger los bosques es muy importante, porque un 80 % de las especies silvestres viven en estos ecosistemas y un 90 % de las personas más pobres dependen de ellos también.