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La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda caminar 150 minutos a la semana, dos horas y media para prevenir el desarrollo de enfermedades no transmisibles. Si se desean mayores beneficios, el ejercicio podría llegar a los 300 minutos semanales. El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM) ha declarado que caminar cierto tiempo semanal “pone en marcha todos los músculos de nuestro cuerpo, activa nuestro cerebro, no requiere entrenamiento previo y es accesible para la mayoría de las edades”.
La OMS recomienda caminar para prevenir enfermedades como diabetes e hipertensión
La OMS recomienda caminar para prevenir enfermedades como diabetes e hipertensión. También sirve para fortalecer el sistema óseo y muscular, a controlar el peso y, sobre todo, a reducir los niveles de estrés y mejorar nuestro estado de ánimo. El COFM ha asegurado que se comienza a quemar grasa a partir de los 20 – 25 minutos de caminata y aseguran que tras 40 minutos pueden perderse hasta “doscientas calorías”. Andar nos puede ayudar a tonificar los músculos y "fortalecer los glúteos, los músculos de la espalda, el abdomen, los brazos y las piernas", además de incrementar la densidad ósea.
¿Qué otros beneficios puede tener caminar? “Aumenta la frecuencia cardíaca, disminuye la presión arterial y fortalece el corazón” 30 minutos diarios de caminata para reducir considerablemente el riesgo de patologías cardiovasculares.
Ayuda a relajarse y a reducir el estrés
Muchos expertos aseguran que practicar cualquier actividad física produce dopamina, la hormona de la felicidad. Por ello, mucha gente corre o antes de ir a trabajar o después. También nos ayuda a reducir pensamientos negativos y estrés. Si caminamos es probable que nos relajemos y cojamos sueño antes: si conciliamos el sueño más rápido, nos despertaremos mucho menos durante la noche y nuestro sueño será de mayor calidad.
El sistema inmunológico, otro de los grandes beneficiados
Caminar ayuda también a fortalecer el sistema inmunológico. Nos previene de afecciones como gripes o resfriados. Caminar también ayuda a recoger más vitamina D. La vitamina D se obtiene a través de los rayos del sol y es fundamental para el sistema inmunológico. Previene la degeneración del hipocampo que está relacionada con la memoria y el aprendizaje.
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