El parásito del Toxocara, presente en parques y playas de España

Se acerca el verano y pronto las playas de nuestro país se llenarán de turistas, tanto locales y extranjeros, para disfrutar de la arena y el sol. Los parques son otro espacio que cada día se va encontrando con más visitantes con la llegada del buen tiempo. Sin embargo, es importante que estemos precavidos sobre el parásito Toxocara cuando acudamos a estos entornos, ya que recientes investigaciones han encontrado este parásito en las arenas de playas y parques españolas.

Así lo explica el microbiólogo de la Universidad de Salamanca Raúl Rivas, en un artículo para el medio Niusdiario.es. En él, comenta que estudios a nivel mundial han encontrado huevos de Toxocara, con una tasa de prevalencia de un 18 % de media en la Península Ibérica. Sin embargo, esta cifra podría variar según la zona en la que nos encontremos. Por ejemplo, su prevalencia en los parques públicos de Madrid se encontraba en un 16 %, frente al 67 % en Murcia.

Conocer más sobre el parásito Toxocara

La Toxacara es un parásito que se encuentra principalmente en las heces de animales como los perros y gatos. De hecho, las variedades más habituales son la Toxocara canis y la cati, que hacen referencia precisamente a los perros y gatos. Aunque no son las únicas, existen un total de 26 especies de este género parasitario y que son "los principales agentes causales de la toxocariasis humana", comenta Rivas en su artículo.

La toxocariasis es una infección que puede llegar a provocar una serie de síntomas nada agradables como la tos, la fiebre o las mialgias. Pero también puede tener consecuencias más graves como alteraciones visuales, encefalitis, trastornos neurodegenerativo, vasculitis cerebral, meningitis o demencia, aunque estos últimos no suelen darse con tanta frecuencia. A pesar de ello, el microbiólo advierte que "los impactos en la salud humana son extremadamente variables, y van desde una infección asintomática hasta un daño tisular severo causado por la migración de las larvas".

Pero que no corra la alarma. Muchos de los síntomas, de moderados a graves, cuentan con tratamiento, concretamente con la administración de mebendazol o albendazol durante algunos días. Aunque sin duda, lo mejor es prevenir un posible contagio, algo que se genera por un contacto directo, principalmente oral, del parásito Toxocara a través de las heces o los restos de las misma. Desde luego teniendo esto en cuenta el riesgo se reduce aunque es importante tomar precauciones.

Estar pendientes en los parques

Muchos niños pequeños están explorando el mundo y lo hacen a través de todos sus sentidos. Sin embargo, es importante estar pendiente del cómo están descubriendo para guiarles de la forma adecuada. Uno de los principales focos de preocupación son los parques con arena, ya que cabe la posibilidad de encontrar restos de el parásito Toxocara por la afluencia de perros o gatos callejeros en la zona. Por eso es importante evitar que los niños se lleven arena a la boca.