Mientras muchos perfiles profesionales tienen grandes dificultades para encontrar trabajo, a estos se los rifan

El mercado laboral se enfrenta a una curiosa dicotomía. Por un lado, muchos trabajadores/ras, se encuentran con auténticas dificultades para encontrar un puesto de trabajo "de lo suyo", o tener condiciones laborales decentes y óptimas para poder vivir y no sobrevivir. Por otro lado, existen algunos perfiles profesionales que se encuentran altamente cotizados, no solo por la cantidad de puestos de trabajos que los requieren, sino también porque empiezan a ser muy escasos.

Esta ambivalencia del mercado laboral, se ha visto principalmente generada debido al impacto de la digitalización en la producción de todo tipo de sectores. Desde tener una página web para una tienda, hasta desarrolladores de software en el plano de la investigación o multinacionales. Y no solamente se trata de perfiles profesionales más técnicos, la escasez se hace notar sobre todo entre los profesionales de ingenierías.

Ingenieros: los perfiles profesionales más cotizados

Según los datos ofrecidos por el Observatorio de la Ingeniería en España, en 2022 se contabilizaban 750.000 ingenieros en total, de los cuales el 3,7 % estaban jubilados. Lo que a su vez posicionaba a España en un ratio superior a otros países europeos en cuando a porcentaje de estos perfiles profesionales que no se encuentran en activo. Esto supone que el relevo generacional en estas profesiones no es lo suficiente para atender a la actual demanda.

Una demanda, que por otro lado, "hace ya unos años se está experimentando una dificultad notable en lo que se refiere a incorporar ingenieros en las plantillas de las empresas", destaca el estudio realizado por parte del Observatorio. Otra cifra que muestra una visión clara sobre estos perfiles profesionales es que el 98 % de ellos se encuentran ocupados, de los cuales el 87 % trabaja en una actividad directamente relacionada con sus estudios.

Cifras que concuerdan con la alta demanda por parte de las empresas de estos perfiles profesionales, que ha generado una importante brecha causada por distintos factores que van desde la caída de matriculaciones en carreras de ingenierías, pasando por la poca presencia, aún, de las mujeres en estas ramas, sin olvidar el conocido fenómeno de la 'fuga de cerebros'. Ante este panorama, hay que sumarle los nuevos impulsos a la transición hacia modelos sostenibles y más tecnificados, lo que inevitablemente requiere de estos profesionales.

Una competencia por la digitalización que España podría perder

Estudiar una ingeniería no es nada sencillo. En su mayoría, se tratan de carreras muy exigentes. "Formar un buen ingeniero lleva al menos cinco o seis años de la etapa universitaria a los que se añade la adquisición de experiencia laboral. No damos abasto para la necesidad que tenemos a corto plazo", comenta César Franco, presidente de la Unión Profesional de Colegios de Ingenieros de España (UPCI) en una entrevista para el diario ABC.

Sin embargo, la escasez de personas que se preparan en estos perfiles profesionales, podría suponer un importante hándicap para España a nivel de competencia y productividad digital con respecto al resto de países occidentales. Una advertencia que llega desde Francisco Hortigüela, director general de Ametic, la asociación representante del sector de la industria digital en España.