Lectura fácil
Los pingüinos barbijo, según un estudio reciente, realizan microsueños de cuatro segundos mientras anidan. Esta estrategia les permite vigilar continuamente sus huevos y polluelos, acumulando un total de 11 horas de sueño diario. Los científicos sugieren que estos pingüinos parecen estar constantemente en un estado de microsueño, lo que les permite equilibrar las demandas de cuidado parental con la necesidad de descanso.
Microsueños pingüinos y otras estrategias asombrosas en el reino animal
Los pingüinos barbijo han superado a los padres humanos en el arte de dormir poco. Un nuevo estudio revela que, cuando anidan, estas aves antárticas realizan "microsueños" de solo cuatro segundos. Esta estrategia les permite mantener una vigilancia constante sobre sus vulnerables huevos y polluelos, al mismo tiempo que logran acumular un total de 11 horas de sueño diario.
Paul-Antoine Libourel, codirector del estudio e investigador biólogo del Centro de Investigación en Neurociencia de Lyon (Francia), comenta: "Parecen estar siempre en un estado de microsueño". Estos fascinantes hallazgos, publicados en Science esta semana, se suman a la creciente evidencia de la diversidad de estrategias de sueño en el reino animal.
Este estudio se une a otros descubrimientos recientes, como el hecho de que los elefantes marinos realizan breves siestas mientras se sumergen bajo las olas y que los delfines mulares duermen con medio cerebro activo, manteniendo la otra mitad alerta. Las fragatas también adoptan una estrategia similar. Además, durante la temporada de apareamiento, los correlimos pectorales priorizan el acto sexual sobre el descanso.
"La razón por la cual algunos animales pueden sobrevivir con solo dos horas de sueño al día, como el elefante, mientras que otros necesitan 20 horas, sigue siendo un misterio", concluye Libourel.
Desafíos nocturnos en la colonia de pingüinos barbijo
En la bulliciosa colonia de pingüinos barbijo, conciliar el sueño resulta todo un desafío. Bañados por la luz constante del sol antártico, rodeados de ruidosos pájaros y envueltos en un penetrante aroma a amoníaco y pescado podrido, los pingüinos enfrentan condiciones adversas.
Won Young Lee, investigador del Instituto de Investigación Polar de Corea, describe la experiencia como mareante. En este entorno, los padres de los pingüinos barbijo se turnan para cuidar el nido, mientras buscan alimento en el mar y se enfrentan a largos trayectos de natación. Para entender cómo logran equilibrar todas estas demandas, un equipo de investigadores colocó dispositivos llamados biologgers en las espaldas de 14 pingüinos, registrando su actividad física y patrones de sueño.
Los sorprendentes resultados revelaron que estos pingüinos barbijo realizan microsueños de apenas cuatro segundos a lo largo del día y la noche mientras cuidan de sus huevos o polluelos. La capacidad de dormir en breves intervalos podría ser una estrategia adaptativa para sobrevivir en condiciones tan desafiantes.
¿Una táctica breve para padres fatigados?
La neurocientífica Chiara Cirelli de la Universidad de Wisconsin destaca que todos hemos experimentado microsueños al quedarnos dormidos brevemente en el metro o viendo televisión. En humanos y pingüinos, estos microsueños surgen en momentos de cansancio, pero los pingüinos barbijo parecen depender en gran medida de ellos.
Cirelli elogió el estudio por capturar datos en condiciones naturales desafiantes. Sin embargo, señala que los investigadores solo observaron a los pingüinos durante la crianza, por lo que no sabemos si microsueñan fuera de esos periodos.
Aunque los datos son convincentes, Cirelli destaca la necesidad de comprender cómo afecta el microsueño al cerebro y al cuerpo de los pingüinos. La privación de sueño en humanos causa problemas de salud, y queda por determinar si los pingüinos experimentan efectos similares. Paul-Antoine Libourel sugiere que los microsueños podrían ser una estrategia de supervivencia a corto plazo para padres pingüinos exhaustos, ya que duermen tramos más largos mientras buscan alimento y al regresar a tierra.
Añadir nuevo comentario