Las mejores actividades de piscina para realizar con niños con discapacidad

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27/07/2024 - 14:00
Actividades de piscina para niños con discapacidad

Lectura fácil

El verano brinda a los niños una excelente oportunidad para disfrutar del aire libre y mantenerse activos. Este periodo es especialmente valioso para aquellos que enfrentan trastornos neurológicos, ya que la piscina ofrece un entorno único que combina diversión con beneficios terapéuticos.

El agua proporciona una resistencia natural que facilita la realización de ejercicios físicos sin el impacto de superficies duras, permitiendo que los niños continúen sus terapias de manera efectiva. Además, el entorno acuático ayuda a mejorar la coordinación y el equilibrio, fortalece los músculos y aumenta la flexibilidad de forma segura y entretenida.

De este modo, la piscina se convierte en un espacio ideal no solo para disfrutar y jugar, sino también para avanzar en su desarrollo físico y emocional durante los meses de calor.

El verano es ideal para aprovechar terapias para niños con discapacidad

El verano es ideal para que los niños aprovechen el aire libre y se mantengan activos. Para aquellos con trastornos neurológicos, la piscina se presenta como un lugar excelente para continuar con sus terapias físicas de manera lúdica y efectiva.

Yaiza Galán, profesora de educación física en El Cole de Celia y Pepe, que integra la piscina en la rutina educativa, destaca las ventajas de la terapia acuática para estos niños:

  • Menor impacto: El agua minimiza el impacto en articulaciones y músculos, facilitando movimientos más suaves y cómodos.
  • Mejora del equilibrio y coordinación: La resistencia del agua favorece el equilibrio y la coordinación.
  • Fortalecimiento muscular: Los ejercicios acuáticos fortalecen los músculos sin el riesgo de lesiones que podrían ocurrir en superficies duras.
  • Mayor flexibilidad: El entorno acuático facilita movimientos que incrementan la flexibilidad de las articulaciones.
  • Estimulación sensorial: El agua ofrece una experiencia sensorial enriquecedora, beneficiosa para los niños con trastornos neurológicos.

Algunos consejos de cara a la piscina

Galán propone varias actividades que padres y cuidadores pueden hacer con los niños en la piscina:

  • Propulsión de piernas: Colocando un churro de piscina entre las piernas, los niños pueden simular montar a caballo. Este ejercicio fortalece las piernas de forma divertida.
  • Movimientos de brazos: Con el churro bajo el pecho, los niños pueden practicar movimientos de brazada hacia adelante, como el estilo mariposa, y luego abrir los brazos para mejorar la amplitud de movimiento y la fuerza.
  • Ejercicios de movilidad de piernas: Tumbados boca arriba o boca abajo, y usando un churro o una tabla de natación para apoyo, los niños pueden mover las piernas de forma controlada para trabajar la propulsión y fortalecer los músculos.
  • Recoger objetos en el agua: Para niños más grandes, lanza varios objetos al agua y desafíalos a recogerlos lo más rápido posible. Usar un cronómetro puede añadir un toque competitivo y motivarles a mejorar su agilidad y coordinación.

Algunos consejos a tener en cuenta

Los expertos destacan la importancia de la supervisión adulta constante durante todas las actividades acuáticas. Los ejercicios deben ajustarse a las habilidades individuales de cada niño, asegurando su comodidad y seguridad en el agua.

Asimismo, es fundamental mantener una comunicación fluida con los profesionales de la salud que supervisan la terapia del niño para garantizar que las actividades acuáticas apoyen adecuadamente los objetivos terapéuticos. Este enfoque es especialmente importante en El Cole de Celia y Pepe.

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