Cuando hablamos de pobreza, muchas personas muestran sentimientos de rechazo o asco hacia las personas más vulnerables. Es lo que se conoce como aporofobia.
Se necesitan esfuerzos urgentes para incrementar la financiación y la puesta en marcha de acciones que ayuden a los países pobres a adaptarse a los crecientes impactos del cambio climático.
La pandemia y la crisis climática ha provocado que las comunidades más vulnerables de Centroamérica sean cada vez más pobres, pasen más hambre y se planteen la migración como única opción.
Por primera vez en la historia moderna se ha reducido la cantidad de migrantes internacionales y la pobreza extrema aumentará en 100 millones de personas.