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Desde Compassion in World Farming y Eurogroup for Animals reclaman planes para prohibir la creación de la primera granja comercial de pulpos en el mundo.
Asimismo, piden a la UE que no se empleen fondos públicos para llevar a cabo este proyecto que atenta contra los ecosistemas marinos, la vida humana y es un acto de crueldad animal.
La ong animalista se apoya en significativas y crecientes pruebas científicas que exponen que este tipo de sistemas de producción acaban con nuestro planeta.
El informe 'La terrible realidad de la cría de pulpos al descubierto', demuestra los efectos tan devastadores
Eurogroup for Animal fue la descubridora de los planes presentados a la Dirección General de Pesca del Gobierno de Canarias a manos de Nueva Pescanova.
Esto ha hecho que las diferentes asociaciones animalistas pongan sobre aviso a las autoridades pertinentes demostrando con hechos las atrocidades y las consecuencias negativas que oculta este proyecto.
Y es que el método de sacrificio cruel, el confinamiento de pulpos en pequeños tanques con prácticas que contribuyen a la sobreexplotación de poblaciones de peces salvajes, con razones por las que no se puede permitir este delito contra la naturaleza y la vida animal.
Los planes revelan que se criarán alrededor de un millón de pulpos en la supuesta granja en el Puerto de Las Palmas de Gran Canaria, en España, produciendo unas 3.000 toneladas de pulpo al año.
También confirman los temores de los defensores del bienestar animal de que se apliquen una serie de prácticas extremadamente preocupantes, entre ellas que los pulpos serían:
- Sacrificados sumergiéndolos en agua con hielo: un método altamente aversivo y no humanitario que, según se ha demostrado científicamente, causa un dolor, un miedo y un sufrimiento considerables, así como una muerte prolongada.
- Confinados en tanques a elevadas densidades y sin estímulos, donde su bienestar se verá comprometido y, además corren el riesgo de sufrir agresiones e incluso canibalismo debido a la naturaleza solitaria y territorial de los pulpos.
- Expuestos a luz artificial las 24 horas del día para aumentar la reproducción, lo que causará un estrés excesivo dada la aversión que estos animales tienen a la luz.
- Alimentados con piensos comerciales que contienen harina y aceite de pescado como ingredientes principales, lo que es insostenible y contribuye a la sobrepesca de las poblaciones salvajes.
- Criados en un sistema de cultivo cerrado de recirculación, el cuál presenta un mayor riesgo de mortalidad masiva debido a las condiciones de hacinamiento necesarias para su rentabilidad, así como impactos medioambientales negativos derivados del uso excesivo de energía.
Una práctica que no deja consecuencias buenas para el planeta
Ya fue en 2021 cuando CWF publico un informe en el que demostraba como la cría de pulpos es cruel y causa graves daños medioambientales en los ecosistemas marinos.
Además, los estudios demuestran como los ensayos experimentales de cría de octópodos en granjas aumentan la mortalidad de los mismo hasta un 20 %, es decir, 1 de cada 5 individuos no sobrevive al ciclo de producción.
Si se aprueba la granja Canaria finalmente, esta se convertiría en la primera a nivel industrial y mundial, pero hay otros países como México y Japón que también están intentando establecer este tipo de producción.
Gracias a la lucha de las ongs animalistas, en este caso de CWF, el Estado de Washington en EEUU, anunció la iniciativa que prohíbe la granja de pulpos, cosa que consiguió el cierre de la única granja en Hawaii, la 'Kanala Octopus Farm'.
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