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Desde la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) se muestran prudentes con los datos. Y es que no coinciden con las previsiones tan optimistas que ha realizado el Gobierno sobre la llegada de turistas. “Ese año tenemos una situación diferente a los últimos tres años que fueron extraordinarios. Por eso el enfoque debe hacerse con cautela”, decía su presidente Juan Molas este jueves durante la presentación del jueves el estudio del Observatorio de la Industria Hotelera Española.
No coinciden las estimaciones, pero será un verano positivo
Este alegato de prudencia contrasta con las previsiones del Gobierno a principios de julio en las que estimaba un incremento de visitantes del 1,7%, así como un 3,2% más de ingresos con respecto al verano de 2018. “Ojála tengan razón y acierten estaríamos encantados”, ha dicho Molas con clara desconfianza ante el optimismo de la ministra del ramo, Reyes Maroto.
Cuentan que la información que maneja CEHAT y las llamadas operadores, agencias y hoteleros que hace él personalmente apuntan en otra dirección.
A rasgos generales, se dibuja un temporada estival estable respecto a la de 2018, pero, a diferencia de otros años, el verano de 2019 será muy diferente según el lugar que se analice.
Baleares y Canarias, donde más baja la llegada de turistas
Así las cosas, este informe prevé menos turistas que el año pasado en Mallorca, Menorca y Gran Canaria y Fuerteventura. Y es que si finalmente se cumplen las estimaciones, esta temporada veraniega estará muy lejos de los años anteriores.
Los turistas alemanes y nórdicos serán los mayores ausentes. En suma, la bajada de precios de hasta el 20% en otros destinos mediterráneos como Turquía ya pasan factura a España.
Presiones de los touroperadores para bajar precios
El sector también está sufriendo la presión de algunos touroperadores internacionales para bajar los precios. Buscarían así conseguir llenar las plazas de avión que otros años a estas alturas ya estaban completas.
No obstante, en el resto de España se confía en el incremento de turismo nacional para cerrar el verano con datos de ocupación similares a los registrados en años anteriores. De hecho, los datos son buenos si los comparamos con los de hace años, pero no hay que perder de vista que llevamos tres temporadas marcando récords y eso es cada año más difícil de superar.
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