Desarticulada una banda de proxenetas que producía criptomonedas en masa

La Policía Nacional ha desarticulado en Badajoz una trama de proxenetas cuyo cabecilla destinaba gran parte de sus beneficios a adquirir máquinas de 'minería' de criptomonedas, que le permitían incrementar de manera sustancial sus ganancias.

Según informó la Policía este pasado lunes, en la operación han sido detenidas tres personas, incluida el cabecilla de la trama, al tiempo que se ha liberado a dos mujeres.

La delincuencia siempre busca nuevas formas de 'resurgir', y de seguir lucrándose a costa de la vulneración de los derechos y la integridad de las personas, entrando en el negocio de la minería bitcoin.

El negocio de las criptomonedas tapaba el delito de proxenetismo que se estaba cometiendo

Las víctimas de proxenetismo del que el dinero que salía se destinaba al negocio de las criptomonedas, en su mayoría eran mujeres de nacionalidad colombiana, explotadas sexualmente en un club de alterne y en una casa de citas de Badajoz. En los cuatro registros domiciliarios llevados a cabo se han incautado, entre otros objetos, dos armas de fuego y abundante munición.

Tras una denuncia de los de las víctimas, se consiguió determinar la existencia de un entramado criminal de origen español y sudamericano que se dedicaba a la explotación sexual de mujeres en situación de vulnerabilidad, en su mayoría de nacionalidad colombiana, en un club de alterne y en un piso de citas de la ciudad de Badajoz.

En todo este entramado, parece que el negocio de las criptomonedas no tenía nada que ver, pero surge para conseguir mayor lucro de este acto criminal.

Los investigadores lograron establecer que la organización criminal captaba a las víctimas en su país de origen con el fin de trasladarlas a España para ejercer la prostitución. Una vez aquí las informaban de la deuda que habían contraído y que debían satisfacer íntegramente con los beneficios obtenidos de los servicios sexuales, no percibiendo ningún porcentaje de estos hasta completar el pago de la deuda.

Las mujeres eran sometidas a constantes coacciones, amenazas y vejaciones verbales. Además de las dos liberadas, los investigadores han localizado a otras siete mujeres como posibles víctimas de la organización.

Gracias a la valentía presentada por una de las víctimas, se ha conseguido desentramar esta red de delincuencia que cometía proxenetismo y se seguía lucrando con el negocio de las criptomonedas.

Los beneficios que salían de la prostitución, se destinaban a la minería del bitcoin

A lo largo de la investigación los agentes también pudieron constatar cómo el principal cabecilla del entramado destinaba gran parte de los beneficios obtenidos por la explotación de las mujeres, a la adquisición de máquinas de minería de criptomonedas con las que incrementaba de manera sustancial sus ganancias.

En los cuatro registros domiciliarios llevados a cabo en la ciudad de Badajoz, los agentes han incautado dos armas de fuego, gran cantidad de munición de calibre 9 milímetros parabellum y 38 especial, un monedero virtual con más de 15.000 euros en criptomonedas, cuatro teléfonos móviles y abundante documentación relevante para la investigación.