El régimen talibán somete a torturas a sus detenidos

Desde UNAMA, la Misión de la ONU en Afganistán, urgen al régimen talibán a tomar medidas urgentes porque se han reportado más de 1.600 casos de violaciones contra los derechos humanos, entre el 1 de enero de 2022 y el 31 de julio de 2023.

Estos hechos deleznables han tenido lugar en 29 de las 34 provincias afganas, a manos de los fundamentalistas a las personas que han decidido detener.

Casi la mitad de los actos registrados han sido actos de tortura y malos tratos, y se llevan a cabo por la policía, y agentes de inteligencia talibanes. Dichos ataques van dirigidos especialmente a periodistas y a defensores de los derechos humanos.

El régimen talibán, desde policía hasta agentes de inteligencia, comete delitos de tortura y malos tratos a los detenidos

"Casi el 50 por ciento de estas violaciones comprenden actos de tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes", aseguró la UNAMA en un comunicado sobre las acciones del régimen talibán contra los derechos humanos.

Las torturas y los malos tratos se ubican por arrestos en lugares de detención que dependen del Ministerio del Interior afgano y la Dirección General de Inteligencia.

Además, también se han documentado algunos casos de vulneración de derechos humanos en las prisiones que dependen de la Oficina de Administración Penitenciaria.

Las detenciones a manos del régimen talibán, corresponden a intentos de obtener confesiones u otra información y los detenidos fueron sometidos a "graves dolores y sufrimientos, mediante palizas físicas, descargas eléctricas, asfixia, posiciones de estrés e ingestión forzada de agua, así como vendaje de los ojos y amenazas", detalla el escrito de denuncia de la ONU.

Dadas estas situaciones, desde la ONU reclaman al régimen talibán que es de alta necesidad la profesionalización de las autoridades penitenciarias y de seguridad del gobierno en varias áreas, así como realizar lo mismo con la capacidad para llevar a cabo investigaciones.

Palizas, descargas eléctricas, entre muchas otras formas de tortura propias del medievo

"Los relatos personales de palizas, descargas eléctricas, torturas con agua y muchas otras formas de tratos crueles y degradantes, junto con las amenazas formuladas contra personas y sus familias, son desgarradores", afirmó en el informe el alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, al respecto de la demanda al régimen talibán para frenar esta situación.

Roza Otunbayeva, representante especial del secretario general para Afganistán y jefa de la UNAMA, quiso destacar y agradecer al gobierno talibán por su compromiso constructivos con la misión sobre permitir visitas a las cárceles.

De esta forma, la UNAMA insta al régimen talibán que establezca un marco de asistencia jurídica sólido, abordando los bloqueos en el proceso de justicia penal que surgen de las detenciones masivas y arbitrarias que no cuentan con ninguna supervisión judicial efectiva.