En 2023, más de 6,600 personas murieron intentando llegar a España, marcando el año más mortífero desde 2007. La ruta hacia Canarias fue la más afectada.
La organización de la Cruz Roja trabaja en un proyecto destinado al reconocimiento de las personas migrantes que desaparecen en el mar. El principal objetivo es mantener a los familiares informados en todo momento.