El salario medio en 2022 creció un 4,1 % hasta 26.948,87 euros, mientras la brecha de género cayó al 17, 1%

En 2022, la remuneración media anual por trabajador en España alcanzó los 26.948,87 euros, lo que representa un incremento del 4,1 % respecto al año anterior. Este aumento se produjo en un contexto donde la brecha salarial entre hombres y mujeres se redujo al 17,1 %, disminuyendo desde el 18 % de 2021.

Según los datos de la 'Encuesta de Estructura Salarial de 2022' del Instituto Nacional de Estadística (INE), el salario medio de los hombres fue de 29.381,82 euros, mientras que el de las mujeres se situó en 24.359,82 euros. Es importante señalar que el crecimiento salarial medio en 2022 superó el repunte del 2,9 % registrado en 2021.

En cuanto a la distribución salarial, el salario mediano, que representa el punto que divide a los trabajadores en dos mitades (los que ganan más y los que ganan menos), se estableció en 22.383,11 euros. Por otro lado, el salario modal, el que se repitió con mayor frecuencia entre los asalariados, fue de aproximadamente 14.586,44 euros. Además, este año se ha observado un desplazamiento de trabajadores de salarios bajos hacia la franja de 14.000 a 15.000 euros, que se convirtió en la más común. En total, un 20,5 % de los asalariados recibió entre 14.000 y 19.000 euros anuales.

 Desglose por género y Comunidades Autónomas

El incremento del salario medio para los hombres fue del 3,5 %, alcanzando los 29.381,84 euros, mientras que el aumento para las mujeres fue del 5,1 %, logrando 24.359,82 euros. Esto significa que el salario promedio femenino representó el 82,9 % del salario masculino. Sin embargo, esta diferencia puede variar según factores laborales como el tipo de contrato, jornada laboral, ocupación y antigüedad, que afectan significativamente la remuneración.

En términos de comunidades autónomas, el País Vasco destacó con el salario medio más elevado, alcanzando los 32.313,73 euros, seguido por la Comunidad de Madrid, con 31.230,73 euros, y Navarra, con 29.189,52 euros. En contraste, Extremadura reportó los salarios más bajos, con 21.922,73 euros, seguidos de Canarias (23.096,92 euros) y Castilla-La Mancha (23.751,71 euros). Las Islas Baleares, el Principado de Asturias y la Comunidad de Madrid experimentaron los aumentos salariales más significativos, mientras que Castilla-La Mancha, Cataluña y la Región de Murcia tuvieron los menores incrementos.

Sectores y ocupaciones con mayor impacto salarial

El sector que reportó el salario medio anual más alto en 2022 fue el de suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, con una ganancia de 55.470,69 euros por trabajador, superando en un 105,8 % la media nacional. Las actividades financieras y de seguros le siguieron, con 47.239,53 euros. Por otro lado, los sectores de hostelería y otros servicios presentaron los salarios más bajos, con 16.274,71 euros y 18.269,96 euros, respectivamente, siendo un 39,6 % y un 32,2 % inferiores a la media nacional.

En lo que respecta a la evolución de los salarios, los mayores incrementos anuales se dieron en el sector de hostelería (11,2 %), transporte y almacenamiento (7,1 %) y actividades inmobiliarias (5,4 %). Sin embargo, algunos sectores como la administración pública y defensa, y otros servicios experimentaron aumentos marginales en sus salarios, con incrementos del 0,1 %, 0,3 % y 2,2 %, respectivamente.

En relación a los tipos de ocupación, los directores y gerentes tuvieron salarios un 120,7 % superiores a la media. Las ocupaciones técnicas y profesionales también superaron la media, mientras que las ocupaciones elementales, los operadores de maquinaria y artesanos de industrias manufactureras y de construcción tuvieron salarios por debajo del promedio. Es notable que, en todas las categorías, las mujeres percibieron salarios inferiores a los hombres. Los grupos con mayor incremento salarial en 2022 incluyeron empleados contables y administrativos (8,4 %) y ocupaciones elementales (6,3 %), mientras que los trabajadores cualificados en sectores agrícolas experimentaron una disminución en su ganancia media anual.