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Cada 15 de septiembre se celebra el Día Europeo de la Salud Prostática, con el objetivo de concienciar y sensibilizar a la comunidad masculina de la necesidad de acudir al urólogo para revisiones periódicas con el fin de evitar, o poder diagnosticar precozmente, enfermedades crónicas como la hiperplasia prostática o cáncer de próstata. En la actualidad, el 69,5 % de los hombres han presentado algún problema médico relacionado, según una encuesta de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC).
Sin embargo, apenas el 31,8 % habría acudido a una revisión o visita al urólogo, según la misma encuesta. Estas cifras, muestran claramente la necesidad de concienciar más sobre la salud prostática. En todo el mundo, se organizan eventos y campañas de concienciación, que también buscan educar y proporcionar todo tipo de información con respecto a los diversos factores de riesgo, así como síntomas a los que estar atentos o hábitos preventivos.
Los factores de riesgo más relevantes asociados a la salud prostática
Lo más importante para cuidar de nuestra salud prostática es tener en cuenta los principales factores de riesgo, para estar pendientes y acudir a consultas de revisión, mejorar nuestros hábitos y cuidarnos. Los más relevantes, algunos marcados por la Biblioteca Nacional de Medicina son:
- Edad: El riesgo de desarrollar problemas prostáticos aumenta con la edad. El cáncer de próstata es más común en hombres mayores de 50 años, y la HPB es una afección que afecta principalmente a hombres mayores. Por lo que es importante iniciar con revisiones más seguidas.
- Antecedentes familiares: Si tienes familiares de primer grado, como padre o hermano, con antecedentes de cáncer de próstata, tu riesgo puede ser mayor. Se cree que hay un componente genético en la susceptibilidad al cáncer de próstata.
- Raza y origen étnico: Los hombres de ascendencia africana tienen un riesgo más alto de desarrollar cáncer de próstata ya menudo lo hacen a una edad más temprana. Los hombres asiáticos tienen un riesgo más bajo en comparación con los hombres de ascendencia caucásica en lo que se refiere a problemas de salud prostática.
- Dieta poco saludable: El consumo excesivo de grasas saturadas y una dieta baja en frutas y verduras pueden aumentar el riesgo de desarrollar problemas de próstata. De esta misma forma, otras enfermedades como la obesidad o el sobrepeso, elevan las posibilidades.
- Inactividad física: La falta de actividad física regular se ha asociado con un mayor riesgo de problemas en la salud prostática general, incluido el cáncer.
- Historial de enfermedades de transmisión sexual: Algunos estudios sugieren que las infecciones de transmisión sexual, como la clamidia, pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer en la próstata.
Antes de iniciar cambios bruscos
Recuerde que es importante hablar con su médico antes de realizar cambios significativos en su dieta o estilo de vida, especialmente si tiene preocupaciones específicas sobre su salud prostática o antecedentes familiares de problemas prostáticos. Tu médico podrá brindarte orientación personalizada y realizar exámenes de detección adecuados si es necesario.
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