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La resolución 2642 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que permite que se envíe ayuda humanitaria para salvar vidas al noroeste de Siria desde el otro lado de la frontera turca, expirará en unos días.
Si el Consejo no logra ampliarlo, las consecuencias serán catastróficas para 4,1 millones de personas en áreas no controladas por el Gobierno, la mayoría de ellas mujeres y niños que necesitan ayuda para sobrevivir en pleno invierno y en medio de un grave brote de cólera.
Las operaciones transfronterizas de la ONU son clave para las personas desplazadas
Sin las operaciones transfronterizas de la ONU, millones de personas, especialmente aquellas desplazadas durante años y en múltiples ocasiones, no tendrán acceso a alimentos y refugio para afrontar las duras condiciones del invierno; a la prevención, el tratamiento y las pruebas necesarias para contener el cólera, al agua potable y a la protección contra la violencia de género.
Cualquier fracaso por parte del Consejo a la hora de extender la resolución también significaría que el Mecanismo de Seguimiento de la ONU (UNMM) dejaría de funcionar, lo que pondría fin a la verificación de la naturaleza humanitaria de los envíos de ayuda a través de la frontera por parte de la ONU.
Su posición sigue siendo consistente y clara: siempre se debe permitir que los servicios de protección y ayuda humanitaria lleguen a quienes los necesitan a través de la ruta más segura, directa y eficiente.
La ONU benefició a casi tres millones de personas en Siria
En 2022, junto a los aliados, entregaron ayuda desde el otro lado de la frontera turca hacia Siria, beneficiando a una media de 2,7 millones de personas cada mes. Esta labor incluyó la recuperación temprana y el apoyo a los medios de subsistencia para fortalecer la resiliencia de las comunidades en toda Siria.
También pudieron reforzar la ayuda dentro de Siria desde las áreas controladas por el Gobierno a través de las líneas del frente hacia el noroeste del país, entregando alimentos, servicios de salud, educación y otros suministros para miles de personas necesitadas.
Actualmente están decididos a mantener y ampliar estas entregas, y pedimos a todas las partes interesadas un acceso humanitario sin trabas, sostenido y predecible al noroeste de Siria desde las áreas controladas por el Gobierno.
Desafíos logísticos y operativos adicionales
Sin embargo, estas entregas cruzadas, si bien son efectivas, no pueden igualar la escala y el alcance de las operaciones transfronterizas, que son y seguirán siendo indispensables.
A diferencia de resoluciones anteriores que extendieron las operaciones transfronterizas por un período de 12 meses, la última acción tomada por el Consejo solo otorgó una autorización de seis meses. Esto produjo desafíos logísticos y operativos adicionales, aumentó los costes operativos y redujo la capacidad de los aliados humanitarios para ayudar a los más vulnerables.
Millones de personas de Siria y muchos otros países vulnerables que dependen del salvavidas transfronterizo para sobrevivir necesitan que esta resolución se renueve sin demora y cuanto antes.
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