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La elección de una crema solar adecuada es de suma importancia durante el verano. La exposición al sol sin protección puede tener consecuencias negativas para nuestra piel, como quemaduras solares, envejecimiento prematuro y un mayor riesgo de cáncer de piel. Por eso, es fundamental tomar en cuenta algunos aspectos al elegir una crema solar para asegurar una protección eficaz.
La radiación solar puede ser perjudicial para la salud, por lo que es importante protegerse con gafas de sol, gorras y crema solar. No obstante, los últimos datos de la Academia Española de Dermatología y Venerología (AEDV) reflejan que solo un 18 % llevan a cabo acciones para ello.
En cuanto a los protectores solares se refiere, debes saber que lo más seguro es que tengas que comprar uno nuevo para el próximo verano, ya que el del año pasado puede estar caducado. Por lo general, su vida útil es de 12 meses una vez abierto, aunque también puede depender de la forma en el que se haya almacenado.
Significado de SPF
En primer lugar, para comprar una nueva crema de protección solar, es crucial considerar el factor de protección solar (SPF) adecuado para tu tipo de piel.
Todos los envases de los protectores solares, sin excepción, tienen impresa en la etiqueta una misma abreviatura: SPF. Estas tres siglas corresponden a Sun Protection Factor, factor de protección solar en español, que significa "qué tan bien el protector, ya sea en spray o en loción, te va a proteger de las quemaduras", tal y como explican desde Neutrogena, empresa estadounidense de cosméticos y productos de cuidado personal. En otras palabras, es la medida de capacidad que tiene dicho protector para evitar que los rayos UVB dañen la piel.
Por su parte, el número que acompaña al SPF indica cuántos rayos UVB puede filtrar el protector y, por tanto, las veces que este aumenta la resistencia de la piel ante quemaduras solares. Cuanto más alta sea la cifra, mayor será la protección y más tiempo vas a poder estar al sol sin quemarte. Por su parte, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) los divide de la siguiente manera:
- Factores de 15 a 25 son de protección media.
- Factores del 30 al 50 ofrecen alta protección.
- Con SPF más de 50 (o 50+) son cremas de protección muy alta.
Asimismo, mientras el SPF15 repele el 93 % de los rayos UVB, el SPF50 lo hace del 98 %, por lo que un protector con SPF 50+ siempre va a ser el más eficiente y, por tanto, el más recomendado. De esta manera, hay que hacer caso omiso a la leyenda de que cuanto más bajo sea el número posterior al SPF más moreno vas a ponerte. De hecho, hacerlo solo va a poner en riesgo tu piel.
Cada persona tiene necesidades diferentes en cuanto a protección solar, dependiendo de su tono de piel y sensibilidad
Si tienes la piel clara o sensible, se recomienda optar por un SPF más alto para una mayor protección.
Además, es fundamental elegir una crema solar de amplio espectro, que proteja contra los rayos UVA y UVB. Los rayos UVA penetran en las capas más profundas de la piel, causando daños a largo plazo, mientras que los rayos UVB son responsables de las quemaduras solares. Una crema solar de amplio espectro te brindará una protección completa contra ambos tipos de rayos.
La aplicación adecuada de la crema solar también es esencial. Asegúrate de cubrir todas las áreas expuestas de tu cuerpo y aplicar una cantidad generosa. No olvides zonas como las orejas, el cuello, los labios y los pies. Además, recuerda volver a aplicar la crema solar cada dos horas, especialmente después de nadar o sudar.
Considera tus preferencias personales y comodidad al elegir una crema solar. Existen diferentes texturas, aromas y presentaciones disponibles en el mercado, como lociones, geles o aerosoles. Elige la que se adapte mejor a tus preferencias para que disfrutes de la aplicación y te sientas cómodo usándola.
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