Lectura fácil
Málaga, 15 mar (EFE).- "Taxi a Gibraltar", que se estrena hoy en las salas españolas, inaugura el 22 Festival de Cine en Español de Málaga, una elección "súper acertada" en opinión de su protagonista Dani Rovira, porque es "un drama y una aventura que resbala hacia la mejor comedia".
"No se me ocurre nada mejor para la inauguración porque la gente la va a celebrar muchísimo y el Festival de Málaga es un hervidero, una 'bombonera'", dice en referencia al conocido estadio del Boca Juniors, situado en mitad del barrio de La Boca en Buenos Aires, por la cercanía del público y el calor que transmiten a los actores.
Así Rovira ayudaba también a su compañero de reparto, el argentino Joaquín Furriel, nuevo en el Festival andaluz, para que entienda "lo que le espera".
"La verdad es que ha sido una alegría que seleccionaran mi película", dice en una entrevista con Efe el director de la cinta, Alejo Flah, que ya presentó en Málaga su anterior largometraje, "Sexo fácil, películas tristes" (2014), que le dio una Biznaga a Ernesto Alterio como mejor actor.
Flah celebra el "escaparate bárbaro" que le brinda el festival a su película, una comedia "a la italiana que mezcla humor con emoción, desgracia y desesperación".
Explica Flah que "Taxi a Gibraltar" es una historia "tan potente" que le parece increíble que no se haya contado todavía: desde la propia imagen del Peñón, "tan cinematográfica", o la idea de que por dentro tiene 52 kilómetros de túneles hechos en la Segunda Guerra Mundial, y "que es la comunidad de monos libres más grande de Europa, los auténticos dueños de la roca".
"Y luego el modo de hablar de los llanitos; es tan particular Gibraltar -dice Flah-, el lugar en sí mismo y la historia que tiene que hace creíble que allí pueda haber oro".
Con guion de Flah y de Fernando Navarro, el filme cuenta las peripecias de tres amigos circunstanciales, un defraudador argentino guapo y convincente que acaba de salir de la cárcel; el taxista que lo recoge, un joven a punto de ser padre que no llega a fin de mes, y una novia que ha huido de su propia boda, en su búsqueda de un tesoro escondido que les cambie su vida miserable.
Flah ha trastocado los roles habituales de los intérpretes porque cree que "cuando a los buenos actores los sacas de su terreno de confort dan lo mejor de sí".
Así, "Rovira hace comedia pero con notas muy distintas, porque su taxista siempre está de mala leche", y Furriel y García Jonsson, que vienen de hacer "dramones" y cintas "muy intensas", le lleva al extremo cómico, convencido de que "el resultado siempre es mejor".
Furriel se ríe de que Flah le haya tenido corriendo medio desnudo por las calles de Gibraltar. "Y hacía frío, ¿eh? -dice a Efe-, cualquiera se hubiera rajado", bromea el argentino.
"Pero lo disfruté muchísimo, venía de trabajar dramas muy psicológicos, thriller de esos que estás todo el tiempo introspectivo, con la narrativa basada en la mirada, y este Diego Manfredi está todo el tiempo sobrexcitado, habla mucho", se ríe.
García-Jonsson se convierte en Sandra, "una chica que genera mucha ternura. Y me encanta su acento, se parece más al mío", dice la sueca de padre sevillano.
"Los tres personajes están desesperados y buscan una salida a la situación que viven; la de Sandra es muy triste, pero ella ve la vida de color de rosa y eso hace que no parezca tan grave", apunta la protagonista de "Hermosa juventud" (2015).
Rovira reconoce que le costó "contenerse" para interpretar a León a quien "entiende muy bien en su estrés y su mal humor".
"Es una doble olla a presión: vive en un taxi y en un sistema que no va bien; lo normal es no saber por dónde va a salir. Para mi, como Dani Rovira -desvela-, ha sido duro contenerme, me daban ganas de saltar muchas veces", dice entre risas.
Y ahí están también el "brexit", la lucha de los taxistas con los VTC y la música de Andrés Calamaro; comentario aparte para José Manuel Poga, enorme como preso que guarda el secreto.
Añadir nuevo comentario