¿Nos salvará la tecnología de la crisis del Covid-19?

La palabra “inteligencia artificial” registró búsquedas récord en Google el pasado mes de mayo, algo que no sorprende a la Directora y Fundadora de Éticas Consulting, Gemma Galdón, que, en un encuentro virtual donde se dio a conocer el informe Covid-19 y el uso responsable de datos. Análisis de iniciativas apoyadas por BID Lab, cubierto por El País, reconoce la demanda de soluciones en tecnología que la población espera que le salve de la crisis del coronavirus.

Esta creciente demanda motivó un programa de financiación de proyectos tecnológicos que aliviaran los efectos de la pandemia. Así, con la mira puesta en la protección de datos y su aporte a la salud pública, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apoyará durante periodos de hasta 18 meses una selección de 20 proyectos tecnológicos enre 500 que alivien el peso de la pandemia.

El Covid provocó 440.000 muertes en Amerítca Latina y El Caribe y 12 millones de contagios para un sistema sanitario regional que apenas invirtió un 6 % del PIB en 2019, según datos de la Organización Panamericana de la Salud.

Una tecnología de autodiagnóstico, entre los proyectos seleccionados

El Instituto brasileño Laura Fressatto fue una de las seleccionadas por su aplicación de autodiagnóstico robotizado. Su fin es reducir el riesgo de contagio y fomentar el monitoreo médico remoto. “Si queremos democratizar el acceso a la salud a través de la tecnología, tenemos que entender el camino que hace el paciente y las dudas que se le presentan”, explica Hugo Morales, responsable de la aplicación, en declaraciones recogidas por El País.

El chatbot efectúa un cribado entre los potenciales pacientes que se acercarán al centro de salud en plena pandemia y presenta una línea temporal con aspectos claves de su historial clínico. También brinda la opción de hacer teleconsultas. La información se almacena y se deriva posteriormente a los 15 hospitales brasileños que hacen uso de ella, así como el posterior monitoreo de los contagiados durante casi dos semanas. Gracias a la aplicación se han ahorrado 190.000 llamadas a los colapsados centros de salud brasileños y más de 6,5 millones de personas han beneficiado de ella.

Una de las dudas que surgen ante estas aplicaciones es la garantía de la privacidad del usuario. “Sabemos que manejamos datos muy sensibles, ese aspecto fue una de nuestras principales preocupaciones”, reconoció Morales en el mismo encuentro virtual. Por ello se instaló un formulario de consentimiento, se retiró la geolocalización de la aplicación y se creó un puesto en la empresa que velara por la privacidad. El BID ha financiado el proyecto con 128.000 dólares (106.000 euros).

Otra de las iniciativas que salieron adelante fue la liderada por Juan Carlos Holguin, de Ecuador. En representación de Grupo Link y Kin Analytics, propuso un sistema de rastreo de interacciones o contact tracing en el que se extremaron las precauciones con la información a pesar de que, según El País, Ecuador carece de una ley estatal de protección de datos.

La brecha de privacidad entre sociedad y tecnología

A pesar de la innovadora tecnología en ciernes, aún existe cierta brecha con la sociedad, lo que lamenta Gemma Galdón. "La gente sigue utilizando las aplicaciones por el mundo en el que vivimos, pero nunca se había desconfiado tanto como ahora; cada vez se tolera menos la falta de transparencia”, explicó durante la conferencia en declaraciones recogidas por El País. “Se puede tener la mejor tecnología con los mayores estándares de privacidad”, afirmó.

Los parámetros utilizados por el equipo de selección del BID han ido más allá respecto al manejo de los datos de lo que estipulaban los Estándares de Protección de Datos de los Estados Iberoamericanos aprobados en 2017, que establecen que se podrá limitar el derecho a la protección de datos para salvaguardar la seguridad nacional, la seguridad pública, la protección de la salud pública, de los derechos y las libertades de terceros, así como por cuestiones de interés público.

La posibilidad que la tecnología otorga al usuario para limitar el tipo de información que cede y el tiempo de uso por terceros es, según Galdón, "el punto de inflexión para que se potencie el uso de soluciones tecnológicas sin temor alguno". La ONU llama a los gobiernos a impulsar la innovación en sus Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030. Ante esto, el Gobierno aprobó recientemente los Presupuestos de 2022 con la inversión en Ciencia e Innovación más alta de la historia.