01/08/2019 - 09:54
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Jennifer Proctor estaba de vacaciones en Mallorca. Ella sólo es una más de los miles de turistas británicos que en estas fechas inundan las Islas Baleares ansiosos de sol.
La joven acudió a unos de los parques acuáticos que salpican la geografía de mallorquina y no pudo dejar pasar la oportunidad de subirse en el 'Banzai'. Fue allí donde se dejó parte de columna vertebral.
El calvario de la joven tras lanzarse por el tobogán
La joven se rompió varias vértebras tras lanzarse por un empinado tobogán. A consecuencia de las operaciones a las que tuvo que ser sometida, ha encogido 10 centímetros de estatura.
En declaraciones a medios británicos, la turista asegura que nadie le explicó cómo tenía que tirarse por la atracción. Se lanzó al vacío sin saber cuál era la forma correcta de colocarse sobre la tabla.
Le fusionaron dos vértebras para unir su columna rota
Tras la cirugía, la joven sufrió durante medio año una infección muy grave.
Proctor, que ha descrito sus vacaciones en Mallorca como una "pesadilla", ha asegurado que perdió un trabajo por culpa del accidente. Aunque ya puede caminar, sufre "mucho dolor" y será operada de nuevo, por tercera vez, a finales de año.
Sus vacaciones en la isla han dejado su vida patas arriba
Tras el accidente, Jennifer ha dejado lo sucedido en manos de sus abogados para investigar los hechos a fondo.
La joven turista británica ha contado que no recuerda bien lo que ocurrió en el momento del accidente, cuando se tiró por el tobogán Banzai de Aqualand Mallorca.
Pero sí que sintió cómo su tabla "golpeó" el agua con tanta fuerza que pudo sentir en el momento cómo se rompía su columna vertebral.
"Supe en seguida que algo iba muy mal. Grité a Jodie (su pareja) que no podía nadar", ha declarado a la prensa británica.
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