Todo lo que puede dar de sí, y no sabías, tu cinta métrica

En toda casa hay algunas herramientas que han llegado allí sin saber muy bien cómo, pero que son tremendamente útiles para el uso cotidiano. Este es el caso de la cinta métrica, una herramienta que se utiliza para tomar medidas, tanto de objetos como de espacios, incluso de personas. Las hay de muchos tipos, tamaños, materiales e incluso marcas, tantos que ni si quiera somos conscientes. Las más populares son las de plástico o las de metal.

Independientemente del material, la función de una cinta métrica está bastante clara: Medir. Y es justo en este sentido en el que tenemos que tomar un par de consideraciones. La primera es saber en qué unidad de medida la tenemos nuestra cinta y cuantas escalas incluye, por que sí, puede tener más de una. De hecho, la mayoría de las cintas métricas, cuentan con las dos unidades de medidas más estandarizadas: La pulgada y los centímetros.

Todo lo que no sabías de una cinta métrica

Sin lugar a dudas, lo más importante para conocer, y utilizar, correctamente una cinta métrica, es saber leer los número que se nos indica en la misma, diferenciando unas unidades de medida de otras. En la mayoría de estas herramientas, se señalan en color rojo, u otro distintivo, las décimas de los centímetros, así podemos identificar el lado que corresponde a esta unidad de medida de forma sencilla y por si no hubiese ninguna otra indicación.

Esto nos puede guiar, tanto si nuestra cinta métrica mide en milímetros y centímetros, o si lo hace en pulgadas, milímetros y centímetros en la misma cara, 3 en 1, lo que desde luego resulta útil si necesitamos hacer conversiones de medidas sobre la marcha. En este segundo caso, debemos estar algo más atentos con las divisiones para no caer en errores. Tomando nuestro punto de referencia en la primera décima marcada de rojo, sabremos que esos son los 10 primeros centímetros.

Las divisiones de líneas más grandes indicarán cada centímetro, mientras que las más pequeñas dentro de cada una de estas, serán los milímetros. Para compararlas con las pulgadas, tendremos que fijarnos en en la parte superior. Se tratan de líneas más espaciadas, donde el primer número se encontrará a la altura de los 51 mm, un poco más de 5 cm. Esta es la medida de una pulgada. Pero la cinta métrica no solo mide pulgadas, sino también 'pies', ya que por cada 12 pulgadas hay 1 pie, que habitualmente también viene señalado.

¿Existen formas mejores o peores de utilizarla?

Aunque utilizar una cinta métrica en un principio parece tremendamente intuitivo, lo cierto es que existen algunas cuestiones a tomar en cuenta para hacer una medición adecuada. La más importante es tenerla bien sujeta. Como sabemos, es bastante flexible, pero si se dobla demasiado, no tomará las medidas de forma adecuada, por lo que es imprescindible hacer uso del botón con la que cuentan todas ellas, para sujetar la cinta y medir de forma precisa.