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Para prácticamente cualquier tipo de procedimiento que se quiera hacer con un inmueble, es esencial conocer cuál es su valor real. Precisamente por este motivo, es muy importante saber los pasos que hay que dar en este sentido y, sobre todo, realizar este trámite de mano de buenos profesionales expertos en el sector.
Cuando se habla de valoración de inmuebles se está haciendo referencia a un proceso administrativo en el cual, los especialistas del sector valoran dicho inmueble a efectos de pago de impuestos y fiscales. En otras palabras, este proceso es el que determina el valor real del inmueble que corresponda en el mercado.
La valoración se puede hacer para todo tipo de inmuebles, desde espacios industriales, a comerciales, residenciales o incluso agrícolas, sabiendo que para cada uno de ellos se debe contar con conocimientos específicos. Son muchas las ocasiones en las que se vuelve necesaria una valoración, teniendo en cuenta que lo ideal siempre es acudir a peritos expertos en la materia. Hay que decir que conocer el valor de un inmueble no debe ser complicado, siempre que se elija al profesional adecuado. También es importante mencionar que, en la actualidad, existen páginas especializadas en Internet que ofrecen una valoracion gratuita de inmuebles, con el objetivo de que los usuarios tengan una idea de la cantidad aproximada que tiene en el mercado.
Para determinar dicho valor, hay que tener en cuenta una serie de aspectos clave, tales como la clasificación del inmueble, superficie, ubicación, calificación, forma, estructura, aprovechamiento o servicios.
Principales métodos de valoración
En la actualidad existen dos métodos de valoración principalmente que se utilizan para calcular el valor de un inmueble, se trata de la valoración relativa y del descuento de flujos de caja.
Valoración relativa
Se trata del método más utilizado si bien, no todos los expertos lo recomiendan. En este caso, para la valoración, se utiliza como baremo el precio que presentan otros inmuebles con características similares, aplicando posteriormente ciertos correctores para conocer el valor final. Se dice que no es recomendable este método, ya que en ocasiones, se puede dar una sobrevaloración a la hora de realizar la comparativa.
Descuento de flujos de caja
En este caso, el método se basa en capitalizar la rentabilidad que se espera pueda llegar a tener el inmueble en cuestión, teniendo en cuenta la rentabilidad requerida. En este sentido, hay que saber los ingresos y los gastos futuros que podrá generar el inmueble.
Para llevar a cabo este método de cálculo de valor, es esencial conocer datos como ingresos, coste anual del IBI, coste anual de comunidad, impuestos, tasa de descuento o la estimación de los beneficios, entre otras cosas.
¿Por qué se hace una valoración de un inmueble?
Son muchos los motivos por los que los usuarios solicitan una valoración de un inmueble. Así, de entre las más habituales están las tributarias, relacionadas con el pago de impuestos sobre los inmuebles y su compraventa; las contables, pudiendo haber muchas causas como subastas, reparto de herencias, separaciones o divorcios, operaciones mercantiles...
Asimismo, se puede hablar de finalidades financieras, es decir, cuando se hace la valoración para realizar trámites relacionados con el mercado asegurador e hipotecario. También están las finalidades judiciales, que se suele dar cuando hay controversias o disputas entre ambas partes y, por último, las finalidades administrativas, en casos como proyectos urbanísticos o actos catastrales, entre otras cosas.
Tasación y valoración, ¿es lo mismo?
La respuesta a esta pregunta claramente es no. En muchas ocasiones los usuarios confunden la valoración inmobiliaria con la tasación y son procesos diferentes. Hay que aclarar que la tasación es un proceso a través del cual, se fija el precio final para llevar a cabo una compraventa oficial. Para realizar la tasación se deben tener en cuenta tanto los datos concretos del inmueble como las características del contexto en el que se encuentra el mismo. Como ya se ha mencionado, la valoración tiene fines más administrativos y existen diferentes métodos para poder llevarla a cabo, independientemente del motivo por el que se haya solicitado este trámite.
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